La UE y EEUU aumentan su cooperacion para evitar las perturbaciones en las cadenas de suministro globales y la escasez de semiconductores
La invasión rusa de Ucrania ha afectado las cadenas de suministro globales. Para contrarrestar el impacto de la guerra, ahora Bruselas y Washington quieren reforzarlas.
El conflicto ha sumido en el caos tanto la producción y como la disponibilidad de componentes clave y ha agravado el aumento de precios relacionado con el coste de vida a ambos lados del Atlántico. En la segunda segunda reunión del Consejo de Comercio y Tecnología UE-EEUU, celebrada este lunes en París las dos partes han tratado de presentar un frente unido ante la guerra de Moscú. "Está claro que la agresión de Rusia contra Ucrania está provocando grandes alteraciones y afecta a muchas mercancías transfronterizas. Primero, está afectando a la energía, donde ya contamos con una cooperación tangible", asegura el vicepresidente económico de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis.
Uno de los productos más gravemente afectados por la falta de disponibilidad son los semiconductores, un componente esencial de los dispositivos electrónicos. Por ello, Bruselas y Washington quieren desarrollar un sistema de aviso temprano para identificar cualquier interrupción global en la producción de semiconductores....
Y que tiene también otro objetivo, limitar el acceso de Rusia a tecnología avanzada."Hemos sido capaces de unirnos de forma inmediata y atacar a Rusia con controles de exportación extremos y básicamente cortarles toda la tecnología avanzada que necesitan para llevar a cabo su operación militar", defiende Gina Raimondo, secretaria de Comercio de Estados Unidos.
Pero, no sólo Rusia está en su punto de mira. También lo está China, uno de los mayores productores de semiconductores del mundo.
Bruselas y Washington también han acordado ampliar sus cadenas de suministro las llamadas tierras raras, unos elementos químicos utilizados para fabricar los semiconductores.