TOKIO, 5 ene - Es previsible que el Banco de Japón revise ligeramente al alza su previsión de inflación para el año fiscal que comienza en abril por el aumento de los costes de la energía, aunque la nueva proyección seguirá pronosticando un crecimiento de los precios por debajo de su objetivo del 2%, según fuentes consultadas.
Con la prolongación de las subidas de precios por el aumento de los costes de los combustibles y las materias primas, es probable que la comisión del banco proyecte una inflación superior al 1% en el próximo año fiscal, dijeron cinco fuentes cercanas al BOJ.
Esta previsión es superior a la última realizada en octubre, según la cual la inflación subyacente de los consumidores se acelerará hasta el 0,9% en el año fiscal 2022, tras registrar un crecimiento nulo en el actual ejercicio fiscal que finaliza en marzo.
"Aunque los costes de la energía son los principales impulsores del aumento de la inflación, hay indicios de que más empresas están empezando a subir los precios", dijo una de las fuentes. Las fuentes hablaron bajo condición de anonimato, ya que no están autorizadas a hablar públicamente.
El Banco de Japón presentará las nuevas proyecciones trimestrales en su próxima reunión de política monetaria del 17 y 18 de enero.