25 mar - El Instituto Nacional de Estadística (INE) revisó inesperadamente el viernes la lectura del crecimiento económico de España en el cuarto trimestre, elevando la expansión global del conjunto del año pasado al 5,1%, frente al 5% estimado anteriormente.
El producto interior bruto (PIB) español creció un 2,2% en el cuarto trimestre, frente a una estimación preliminar del 2%, gracias a que el gasto de los hogares, la inversión de las empresas y las exportaciones fueron mejores de lo previsto, según los datos revisados.
El gasto de los hogares creció un 1,5% en los tres últimos meses del año, más del doble de la expansión registrada en el tercer trimestre, mientras que el sector de la construcción creció un 3,4%.
El INE también ha revisado los datos del PIB del tercer trimestre con respecto a un año antes hasta una expansión del 3,5%, frente a la proyección anterior del 3,4%.
A pesar de la revisión al alza, el crecimiento en 2021 sigue estando muy por debajo del objetivo del Gobierno español del 6,5% y muchos analistas han recortado sus perspectivas para 2022.
La ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, ha advertido de que el impacto de la invasión rusa de Ucrania puede ralentizar la recuperación económica de España, pero el Gobierno aún no ha revisado el optimista objetivo de un crecimiento del 7% que presentó el año pasado.
Los precios de la energía, que ya subieron el año pasado cuando la economía mundial empezó a recuperarse de los efectos negativos de la pandemia del COVID-19, se han disparado tras la invasión rusa de Ucrania, lo que ha disparado la inflación en toda Europa.
Los transportistas españoles llevan casi dos semanas en huelga, lo que ha provocado una escasez esporádica de algunos productos, obligando a algunas empresas a cerrar y a algunos fabricantes a reducir la producción, lo que pesará aún más en el crecimiento económico de España.