SHANGHÁI - Tesla envió el miércoles un cargamento de 4.767 coches desde su planta de Shanghái con destino a Eslovenia, el primer lote de exportaciones desde la reapertura de la fábrica el 19 de abril, informó el medio de comunicación Shanghai Observer, respaldado por el Gobierno chino.
El barco Glovis Splendor partió a primera hora del miércoles de Shanghái con los coches de Tesla y se dirige al puerto de Koper, en Eslovenia, según el medio de comunicación con sede en Shanghái.
Tesla también ha dispuesto el envío de 4.100 coches para el viernes, dijo, añadiendo que el fabricante de automóviles tiene como objetivo exportar 300.000 coches desde Shanghái en 2022.
"Tesla tenía mucha prisa para cargar los coches recién salidos de las líneas de producción en el barco ayer por la tarde", dijo Shanghai Observer, citando a un responsable de aduanas.
La empresa no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios de Reuters.
Tesla no exportó ningún ejemplar de Model 3 ni de Model Y fabricado en China desde la planta de Shanghái en abril, dijo el martes la Asociación de Automóviles de Pasajeros de China, ya que las políticas de cero COVID-19 de China interrumpieron la producción y la logística.
El envío indica los mayores esfuerzos para que las operaciones en la planta de Tesla en Shanghái, que produce el Modelo 3 y el Modelo Y para su venta en China y para la exportación a otros mercados, vuelvan a los niveles normales.
La reapertura de la fábrica el 19 de abril se llevó a cabo con la ayuda del Gobierno de Shanghái y fue ampliamente cubierta por los medios estatales chinos. Se puso como ejemplo de cómo la ciudad trata de mantener abiertas las empresas mientras aplica una dura política contra el COVID-19.
Tesla fabricó 10.757 coches en su planta de Shanghái en abril y se había fijado como objetivo alcanzar una producción diaria de 2.600 vehículos a partir del 16 de mayo, según informó anteriormente Reuters.
Sin embargo, el objetivo está siendo dificultado por los problemas de suministro y logística, y la planta funcionó muy por debajo de su capacidad el martes, mostrando los problemas a los que se enfrentan las fábricas al tratar de aumentar la producción bajo el estricto confinamiento por COVID-19 en la ciudad.