6 oct - El principal selectivo bursátil español retrocedió por segunda jornada consecutiva el jueves, en un clima de renovado pesimismo tras el recorte de producción de la OPEP+ y las declaraciones de miembros de la Fed, que oscurecen un horizonte económico acechado por la recesión.
La decisión de la OPEP+ de recortar la producción del crudo en 2 millones de barriles diarios antes del invierno ha hecho que se disparen los precios del Brent, que subía un 0,9% al redactar esta crónica, y los analistas apuestan por que el alza de los precios afecte especialmente a una Europa ya sumida en una crisis energética.
Por lo demás, la principal inquietud de los mercados seguía siendo la escalada en el endurecimiento monetario, ante el temor a que la persistente inflación no permita relajar pronto el agresivo ciclo de alzas de tasas de interés de la Reserva Federal (Fed) y otras instituciones.
El incremento en las cifras semanales de desempleo en EEUU —que podría interpretarse como un enfriamiento económico bienvenido por la Fed— sirvió de breve apoyo alcista a la renta variable, pero las preocupaciones de fondo retornaron rápidamente a un mercado con poco apetito por el riesgo.
Ante este panorama, el selectivo bursátil español Ibex-35 cerró con una caída de 68,80 puntos el jueves, un 0,91%, hasta 7.511,10 puntos, mientras que el índice de grandes valores europeos FTSE Eurofirst 300 perdió un 0,57%.
En el sector bancario, Santander perdió un 0,99%, BBVA retrocedió un 0,43%, Caixabank cedió un 1,29%, Sabadell cayó un 1,13%, y Bankinter se dejó un 2,72%.
Entre los grandes valores no financieros, Telefónica retrocedió un 0,74%, Inditex cedió un 0,59%, Iberdrola se dejó un 1,04%, Cellnex cayó un 2,04% y la petrolera Repsol perdió un 1,22%.