El certamen World Travel Awards ha vuelto a recompensar a San Petersburgo en 2021, nombrándola “Destino patrimonial líder de Europa” y “Destino urbano líder de Europa” tras haberle otorgado el galardón de “Destino cultural líder en el mundo” en 2020 y 2019.
La ciudad de San Petersburgo, poblada de grandes palacios barrocos, cúpulas doradas y multicolores y majestuosas fuentes, fascina a los viajeros desde hace siglos.
PUBLICIDADConocida como la capital rusa de la cultura, sus extensas colecciones de arte son famosas en el mundo entero. El festival de las Noches Blancas, que se celebra en verano cuando los días no tienen fin, atrae a los más prestigiosos artistas nacionales e internacionales en los ámbitos de la música clásica, el ballet y la ópera.
Pero los meses invernales no se quedan atrás en cuanto a atracciones espectaculares, como las fiestas de Año Nuevo y las decoraciones urbanas. Fundado en 2016, uno de los festivales rusos más esperados es el Festival de la Luz de otoño, durante el que las paredes de edificios emblemáticos sirven de lienzo a un espectáculo de luz y sonido.
Visitar San Petersburgo es más fácil que nunca
Ya sea para hacer una pausa urbana de camino hacia otras ciudades rusas o como destino único, San Petersburgo resulta cada vez más atractivo a los turistas. Además de contar con una extensa red de transporte aéreo, marítimo y ferroviario, es la primera ciudad rusa en integrar el programa internacional Safe Travels, que garantiza el cumplimiento de todos los requisitos de sanidad y seguridad estipulados por el Consejo Mundial del Viaje y el Turismo (WTTC, por sus siglas en inglés).
En el marco de esta iniciativa, los lugares de interés turístico que cumplen las recomendaciones de la Organización Mundial del Turismo (OMT) y de la Organización Mundial de la Salud (OMS) reciben el distintivo “Safe Travels SPB”, garantía de que los servicios que ofrece la ciudad cumplen los requisitos y normas de sanidad internacionales.
Otra medida destinada a potenciar el turismo es la introducción de un visado electrónico que permite a ciudadanos de 52 países (lo que incluye la mayor parte de Europa) entrar en Rusia sin complicaciones y pasar hasta 16 días en el país.
PUBLICIDADLa campaña “Dos ciudades, un millón de impresiones” es otra iniciativa innovadora: un plan de unificación entre San Petersburgo y Moscú para promocionar una serie de eventos y actividades que ponen de relieve las atracciones, museos, teatros y opciones gastronómicas que ofrecen ambas ciudades.
“Piter”, como llaman a San Petersburgo sus habitantes, forma parte del “Collar de plata”, una ruta a través de las ciudades más importantes y las 11 regiones más espectaculares del noroeste ruso. El recorrido incluye multitud de monumentos históricos y culturales, muchos de los cuales son reconocidos como patrimonio mundial de la UNESCO.
Un crisol de influencias
El zar Pedro el Grande quería que San Petersburgo, su gran proyecto, fuese una puerta a Europa, y muchas de sus ideas surgieron en las épocas que pasó trabajando y viajando en otras zonas del continente.
Entre los muchos nombres con que se conoce a San Petersburgo están “la Venecia del Norte”, por su red de canales, y “el París del Norte”, por sus amplios bulevares y la elegancia de su arquitectura de estilo occidental.
En su centro geográfico se encuentran los astilleros del Almirantazgo y los canales que parten de ellos. Esta zona está inspirada en el diseño urbano de Ámsterdam, donde Pedro el Grande pasó su juventud trabajando en los astilleros. El edificio del Almirantazgo, con sus elegantes columnas alineadas, es inconfundible gracias a su fina aguja dorada rematada por una veleta de oro en forma de barco, uno de los principales emblemas de la ciudad.
A escasa distancia se encuentra la isla de Nueva Holanda, construida en un terreno pantanoso en 1719 y que más tarde se convertiría en el primer puerto militar de la ciudad. En la actualidad, es el lugar que mejor representa la nueva imagen de San Petersburgo. Un ambicioso plan de desarrollo ha transformado la isla en un punto de encuentro moderno que cuenta con tiendas, restaurantes y jardines elegantes, además de galerías y estudios creativos e innovadores.
Las obras artísticas y eclesiásticas más destacadas
Sin embargo, la mayoría de la gente que visita San Petersburgo se siente atraída por el esplendor de su arte y arquitectura. Una de sus atracciones principales es el Hermitage, el museo de arte más grande del mundo. Se estima que, si una persona pasase ocho horas diarias en el Hermitage, tardaría 15 años en ver como es debido todas las obras que alberga.
La mayor parte de su colección se encuentra en el Palacio de Invierno, un enorme e imponente complejo barroco que ha servido de residencia a múltiples emperadores a lo largo de los años. El palacio está en la Plaza del Palacio, frente a otro monumento igual de impresionante: el Edificio del Estado Mayor, donde se encuentra otra parte de la colección del Hermitage.
Pero para disfrutar de un arte contemporáneo fascinante, merece la pena alejarse del centro y visitar el museo Erarta en la isla Vasílievski, que ofrece una estupenda muestra del arte ruso de los últimos 50 años.
Y si se ha preguntado alguna vez dónde encontrar esas fabulosas torres de estilo Disney que se han convertido en un símbolo de San Petersburgo, le recomendamos que visite un monumento con un nombre tremendamente evocador: la iglesia del Salvador sobre la Sangre Derramada. Esta obra de estilo ruso romántico y medieval se construyó a principios del siglo XX en homenaje a Alejandro II, que fue asesinado en el lugar de su emplazamiento (de ahí le viene a la iglesia su nombre tan tétrico).
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Tipos de turismo especializado
Se pueden pasar fácilmente dos semanas en San Petersburgo sin quedarse sin atracciones que visitar y la infraestructura de la ciudad se adapta constantemente al flujo de visitantes y a las nuevas tendencias. Un ejemplo es el crecimiento del ecoturismo, y es más fácil que nunca visitar las numerosas reservas naturales de flora y fauna que hay en San Petersburgo.
La ciudad es también un centro importante de negocios y contactos profesionales gracias a sus estupendas instalaciones para el turismo MICE (Meetings, Incentivos, Conferencias y Exposiciones). Entre los grandes eventos que se celebran a lo largo del año están el Foro Económico Internacional de San Petersburgo, el Foro Cultural Internacional de San Petersburgo y el Foro Legal Internacional de San Petersburgo.
Muchos viajeros se sienten atraídos por la gran calidad de la oferta sanitaria de la ciudad, cuya demanda ha aumentado a causa de la pandemia del COVID-19. La rehabilitación puede consistir en algo tan sencillo como una estancia a orillas del mar en el golfo de Finlandia o una visita a un banya: una casa de baños tradicional rusa con sauna y piscina de agua helada.
Otras personas vienen para beneficiarse de los prestigiosos especialistas y tratamientos disponibles en San Petersburgo. Los programas de recuperación posCOVID incluyen la balneoterapia, la marcha nórdica y la baroterapia, que llena los pulmones de oxígeno. Además, hay multitud de opciones en el ámbito de la odontología, la cardiología, la cirugía de alta tecnología, la ortopedia y la reproducción asistida.
Muchos de estos tratamientos no están disponibles en el país de origen de los viajeros o son demasiado caros, pero estas motivaciones son secundarias en comparación con el encanto del espectáculo único, a la vez relajante y dinámico, que ofrece San Petersburgo.
