Las autoridades comienzan a evaluar los daños causados por los terroristas suicidas en la terminal del aeropuerto Atatürk de Estambul. Más de 40 personas murieron y alrededor de 240 resultaron heridas en los ataques. El Gobierno turco sospecha que los suicidas eran militantes del grupo Estado Islámico.
El primer ministro turco, Binali Yildirim, dijo que, poco a poco, el tráfico aéreo está volviendo a la normalidad.