Un tema que centrará la septima Cumbre Asia- Europa que comienza mañana, relegando a un segundo plano temas como el cambio climático o el desarrollo sostenible. “Necesitamos una respuesta coordinada para reformar el sistema financiero. Estamos viviendo tiempos sin precedentes, y necesitamos unos niveles de coordinación global, también sin precedentes. Es muy simple; o nadamos juntos o nos hundimos juntos”, aseguraba José Manuel Durao Barroso, desde la sede de la Comisión Europea en Pekín.
Los líderes europeos van llegando a Pekín, donde las reuniones bilaterales ya han comenzado. Nada más aterrizar en la capital china, y acompañada de una delegación de empresarios, la canciller alemana, Angela Merkel, ha visitado una fábrica de la firma automovilística Mercedes. Por delante, dos días de encuentro y un objetivo; que Bruselas y Pekín logren un consenso de cara a la reunión al más alto nivel sobre la crisis financiera, prevista para el 15 de noviembre en Washington.