Último día de competiciones individuales en el Campeonato del Mundo de judo de Chelyabinsk, Rusia.
Teddy Riner era uno de las figuras más esperadas sobre el tatami y no decepcionó. El campeón olímpico francés se proclamó campeón del mundo en su categoría, más de 100 kilos, y sumó su séptimo título mundial, igualando a mitos como el japonés Tani o el chino Tong. Riner se impuso en la final al nipón Sichinohe, que eso sí ofreció más resistencia de la prevista. El ruso Saidov se llevó la primera medalla de bronce y el brasileño Rafael Silva, la segunda.
En menos de 100 kilos, también se cumplieron los pronósticos y el campeón de Europa y número uno del ránking mundial, el checo Lukas Krpalek, se colgó la medalla de oro. Derrotó en la final a una de las grandes sorpresas, el cubano José Armenteros. Lo hizo con un decisivo tate-siho-gatame que acabó con las resistencia de su oponente. Primera medalla de oro para la expedición checa. Los bronces se los llevaron Ivan Remarenco, de Emiratos Árabes Unidos, y el alemán Karl-Richard Frey.
En cuanto a las categorías femeninas, el único oro en juego era en más de setenta y ocho kilos. Se lo colgó la cubana Idalys Ortiz. La campeona del mundo y olímpica batió en la final a la brasileña Maria Suelen Altheman, reeditando de esta manera lo sucedido en la final del Mundial de Rio de Janeiro del año pasado. La cubana ganó con un ura-nage para ippon. Los bronces en esta ocasión fueron para la japonesa Tachimoto y para la francesa Emilie Andeol. Este domingo, las competiciones por equipos.