Varias decenas de mujeres, musulmanas y no musulmanes, celebraron una “fiesta playera” frente a la embajada francesa en Londres el jueves 25 de agosto para protestar por la prohibición del burkini en algunas playas de Francia. La protesta fue organizada en Facebook por dos amigas después de la publicación de una fotografía en la que se ve a varios policías franceses armados obligando a una mujer en una playa a quitarse el burkini. La izquierda laica para algunos analistas ha claudicado ante la extrema derecha integrista musulmana.
Algunos de los que rechazan el burkini lo hacen porque ven en él una humillación impuesta a la mujer. No es el caso de Amnistía Internacional que consideró que mantener la prohibición existente en varios municipios franceses contra este traje de baño utilizado por las musulmanas para cubrir su cuerpo podría abrir la veda “a violencias contra mujeres y niñas”.
