Había zarpado de Turquía y se dirigía a Libia
Un barco lleno de materiales explosivos. Ese fue el particular regalo de Reyes que se encontró el pasado 6 de enero la Guardia Costera griega en las costas de Creta, según se anunció este miércoles. El Andrómeda, con bandera de Tanzania, provenía de Turquía y se dirigía a Libia.
El barco, que permanece anclado en el puerto de Heraclión, llevaba en su interior 29 contenedores repletos detonadores, nitrato de amonio y gel especial inflamable. La Guardia Costera definió el hallazgo como una auténtica "bomba ambulante".
La tripulación del Andrómeda, formada por cinco indios, dos ucranianos y un albanés fue arrestada. La documentación oficial recoge que los materiales fueron cargado en los puertos turcos de Mersín y Alejandreta y que el barco se dirigía a Yibuti y Omán, si bien las investigaciones posteriores han determinado que el cargamento iba a ser descargado en Misrata, Libia. El país del Magreb tiene prohibida cualquier transferencia de armas tras el embargo impuesto por Naciones Unidas y la Unión Europea en 2011.