Enfrentamientos entre policía y cientos de personas en la ciudad turca de Diyarbakir. La policía utilizó cañones de agua y detuvo a varias personas que querían entrar al cementerio de la ciudad, donde el día anterior se había enterrado a un activista kurdo.
Según las autoridades, Zülküf Gezen, de 30 años, se suicidó el sábado en su celda cuando cumplía condena por un atentado con bomba en 2007 en el que murió un policía.
Fue la policía quien trasladó su cuerpo hasta el cementerio y lo enterró el domingo sin avisar a la familia, lo que suscitó airadas protestas.