LONDRES, 1 oct - Muchas gasolineras británicas seguían vacías el viernes después de una semana caótica en la que se produjeron compras motivadas por el pánico, peleas en los surtidores y conductores que acaparaban combustible en botellas de agua después de que la aguda escasez de camioneros pusiera a prueba las cadenas de suministro.
La escasez de trabajadores tras el Brexit y la pandemia de COVID ha sembrado el desconcierto en algunos sectores de la quinta economía mundial, interrumpiendo las entregas de combustible y medicamentos e incluso provocando el temor a un sacrificio masivo de ganado.
Los ministros británicos llevan días insistiendo en que la crisis está amainando o incluso ha terminado, pero empresas de venta minorista dijeron que más de 2.000 gasolineras estaban secas y los reporteros de Reuters en Londres y el sur de Inglaterra dijeron que docenas de surtidores seguían cerrados.
Colas de conductores, a menudo con gesto de enfado, salían de las gasolineras que seguían abiertas en Londres.
La Asociación de Minoristas de Gasolina (PRA), que representa al 65% de las 8.380 gasolineras británicas, dijo que sus miembros informaron el jueves de que el 27% de los surtidores estaban secos, el 21% tenía solo un tipo de combustible y el 52% tenía suficiente gasolina y diésel.
"Se está agotando más rápido de lo habitual debido a una demanda sin precedentes", dijo el director ejecutivo de la PRA, Gordon Balmer.
Según el ministro de Policía, Kit Malthouse, la crisis de los carburantes en Reino Unido se está estabilizando, aunque la demanda sigue siendo elevada.
"La situación se está estabilizando en todo el país, aunque obviamente sigue habiendo una gran demanda de combustible", dijo el viernes Malthouse a Sky News. "Esperemos que en los próximos días eso se alivie a medida que los depósitos se llenen".
Después de que la escasez de camioneros desencadenara el pánico en las gasolineras, los ganaderos advierten ahora que la escasez de carniceros y trabajadores de los mataderos podría obligar a un sacrificio masivo de hasta 150.000 cerdos.
Minette Batters, presidenta de la Unión Nacional de Agricultores, dijo que un sacrificio de hasta 150.000 cerdos estaba "potencialmente a una semana o diez días".