CIUDAD DE MÉXICO, 23 oct -Un enfrentamiento entre presuntos miembros del Cártel de Golfo, militares y policías locales en la ciudad mexicana Matamoros, en la frontera con Texas, dejó cuatro personas muertas, cuando faltan unas semanas para que Estados Unidos reanude su polémico programa de retorno de solicitantes de asilo a México.
El enfrentamiento la noche del viernes, cuando habitantes de la ciudad visitaban plazas y cenaban en restaurantes, desató fuertes balaceras que fueron transmitidas por redes sociales junto con videos que mostraban a personas tratando de protegerse.
De acuerdo al gobierno de Tamaulipas, donde se encuentra Matamoros, miembros del cártel lanzaron en calles artefactos para desinflar llantas e incendieron autos con los que bloquearon calles para evitar ser perseguidos por fuerzas de seguridad.
La autoridad confirmó más tarde la muerte de Ariel Trevino, alias "El Tigre", jefe de sicarios del Cártel del Golfo y cercano al líder de la agrupación criminal, José Alfredo Cárdenas, durante el operativo. También dijo que una persona sin vínculos con el grupo murió durante el enfrentamiento.
Tamaulipas es una de las zonas más violentas de México y varias de sus ciudades, como Reynosa y la misma Matamoros ha sido sedes de campamentos de migrantes, en su mayoría de centroamericanos y haitianos, que llegan a la frontera para proseguir con los trámites de sus solicitudes de asilo en Estados Unidos o alguna oportunidad para cruzar a territorio estadounidense.
La administración del presidente Joe Biden está tomando medidas para reiniciar a mediados de noviembre un plan de su predecesor, Donald Trump, que obligó a los solicitantes de asilo a esperar en México por sus audiencias, después de que un tribunal consideró que la terminación del programa era injustificada.
El posible restablecimiento de los Protocolos de Protección a Migrantes (MPP), conocidos como "Permanecer en México" se sumaría a una mezcla confusa de políticas estadounidenses vigentes en la frontera con México, donde los cruces hacia el norte han tocado máximos de 20 años en los últimos meses.
El gobierno de Biden ha dicho, sin embargo, que planea hacer otro intento para frenar el MPP. México ha manifestado su preocupación a su socio comercial sobre la implementación del programa y ha pedido se garantice la seguridad de los migrantes.