Por Layli Foroudi y Lucien Libert
DUNKERQUE,Francia/ZAGREB, 25 nov - Francia dijo el jueves que reforzará los operativos de vigilancia en sus costas del norte, mientras grupos de migrantes hacinados en campamentos dijeron que ni las medidas del Gobierno ni la tragedia de personas ahogadas el día anterior les impedirían intentar cruzar el Canal de la Mancha a Reino Unido.
Diecisiete hombres, siete mujeres y tres adolescentes murieron el miércoles cuando su bote se desinfló en el Canal de la Mancha, uno de los muchos viajes arriesgados iniciados en barcazas desvencijadas y sobrecargadas con personas que huyen de la pobreza y los conflictos en países como Afganistán e Irak.
Las muertes profundizaron la animosidad entre Gran Bretaña y Francia, que ya estaban en desacuerdo por el Brexit. El primer ministro Boris Johnson responsabilizó a París y el ministro del Interior francés, Gerald Darmanin, acusó a Reino Unido de "mala gestión en inmigración".
Con relaciones tensas por el Brexit y la inmigración, gran parte de la atención el jueves se centró en quién debería asumir la responsabilidad, incluso aunque ambas partes prometieron buscar soluciones conjuntas.
El presidente Emmanuel Macron defendió las acciones de Francia, pero dijo que el suyo es simplemente un país de tránsito para muchos migrantes y que se necesitaba más cooperación europea para abordar la inmigración ilegal.
"Diré (...) muy claramente que nuestras fuerzas de seguridad están movilizadas día y noche", dijo Macron durante una visita a la capital croata, Zagreb, prometiendo "máximo despliegue" de las fuerzas francesas, con reservistas y drones supervisando la costa.
"Pero sobre todo, necesitamos fortalecer seriamente la cooperación (...) con Bélgica, los Países Bajos, Gran Bretaña y la Comisión Europea", expresó.
"QUIZÁS MURAMOS"
El incidente del miércoles fue el peor de su tipo registrado en la vía que separa Gran Bretaña y Francia, una de las rutas marítimas más transitadas del mundo.
Pero los migrantes en un pequeño campamento improvisado en las afueras de Dunkerque, cerca de la playa, dijeron que seguirían tratando de llegar a Gran Bretaña, sin importar los riesgos.
"Ayer fue triste y nos da miedo, pero tenemos que ir en barco, no hay otro camino", dijo Manzar, un kurdo de 28 años procedente de Irán que salió de Irán hace seis meses y llegó a Francia hace 20 días, después de recorrer Europa, acurrucado junto a unos amigos alrededor de una fogata.
Reino Unido reiteró el jueves una oferta de tener patrullas conjuntas británico-francesas frente a la costa francesa cerca de Calais.
París se ha resistido a tales llamamientos y no está claro si cambiará de opinión cinco meses antes de unas elecciones presidenciales en las que la migración y la seguridad son temas importantes.
También se trata de asuntos delicados para Gran Bretaña, donde los activistas del Brexit dijeron a los votantes que abandonar la Unión Europea significaría recuperar el control de las fronteras del país. Londres ha amenazado en el pasado con recortar el apoyo financiero para la vigilancia fronteriza de Francia si París no logra detener el flujo de migrantes.
Voluntarios de rescate y grupos de derechos dijeron que se esperaban incidentes de ahogamientos, ya que los traficantes y migrantes corren más riesgos para evitar una creciente presencia policial.
"Acusar sólo a los contrabandistas es ocultar la responsabilidad de las autoridades francesas y británicas", dijo la ONG Auberge de Migrantes. El grupo y otras ONG señalaron la falta de rutas de migración legales y seguridad adicional en el enlace ferroviario submarino Eurotunnel, lo que ha empujado a los migrantes a probar suerte en el peligroso cruce marítimo.
"Esta es una tragedia que temíamos, que se esperaba, ya habíamos hecho sonar la alarma", dijo Bernard Barron, jefe de la región de Calais SNSM, un grupo de voluntarios que rescata a personas en el mar.
Pero Gran Bretaña rechazó una de las principales demandas de las ONG.
Proporcionar una ruta segura para que los migrantes soliciten asilo de Francia solo se sumaría a los factores de atracción que alientan a las personas a realizar viajes peligrosos, dijo el portavoz de Johnson cuando se le preguntó sobre la posibilidad de un medio seguro para pedir refugio de Francia.
El número de migrantes que cruzan el Canal de la Mancha ha aumentado a 25.776 en lo que va de este año frente a 8.461 en 2020 y 1.835 en 2019, según la BBC, citando datos del Gobierno.
Antes del desastre del miércoles, 14 personas se habían ahogado este año tratando de llegar a Gran Bretaña, dijo un funcionario francés. En 2020, siete personas murieron y dos desaparecieron, mientras que en 2019 perdieron la vida cuatro migrantes.