LEÓPOLIS, Ucrania, 24 mar - Las autoridades ucranianas en la sitiada Mariúpol dijeron el jueves que unos 15.000 civiles habían sido deportados ilegalmente a Rusia desde que las fuerzas rusas tomaron partes de la ciudad portuaria del sur.
Las autoridades ucranianas afirman que los civiles atrapados en Mariúpol, que normalmente alberga a unas 400.000 personas, se enfrentan a una situación desesperada sin acceso a alimentos, agua, electricidad o calefacción.
Las autoridades locales dijeron el domingo que miles de residentes habían sido llevados por la fuerza al otro lado de la frontera, pero no proporcionaron una cifra más precisa. Las agencias de noticias rusas dijeron entonces que los autobuses habían transportado a varios cientos de personas que Moscú llama refugiados desde Mariúpol a Rusia en los últimos días.
"Los residentes del distrito de la Margen Izquierda están empezando a ser deportados en masa a Rusia. En total, unos 15.000 residentes de Mariúpol han sido objeto de deportaciones ilegales", dijo el ayuntamiento de Mariúpol en un comunicado emitido el jueves.
Rusia niega haber atacado a civiles durante su "operación militar especial" (según la terminología del presidente Vladimir Putin) para, supuestamente, desmilitarizar y "desnazificar" Ucrania. Ucrania y Occidente dicen que Putin lanzó una guerra de agresión no provocada.
La vice primera ministra, Iryna Vereshchuk, declaró en una sesión informativa por vídeo que las autoridades ucranianas seguían esforzándose por lograr un acuerdo con Rusia para abrir un corredor seguro hacia y desde Mariúpol.
Cada parte ha culpado a la otra por el reiterado fracaso en acordar los arreglos para evacuar a los civiles de Mariúpol, cuyo control ayudaría a Rusia a asegurar un corredor terrestre a la península de Crimea que Moscú anexó de Ucrania en 2014.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, dijo el martes en un discurso por vídeo ante el parlamento de Italia que no quedaba "nada" en Mariúpol tras semanas de bombardeos rusos.
Un equipo de Reuters que llegó el domingo a una parte de Mariúpol controlada por Rusia describió un páramo de bloques de apartamentos carbonizados y cuerpos envueltos en mantas tirados junto a una carretera.