Por Gavin Jones y Angelo Amante
ROMA, 28 mar - En la capital ucraniana, Kiev, ha habido más de 100 muertos desde el inicio de la invasión rusa de su país vecino, declaró el lunes el alcalde de la ciudad, Vitali Klitschko.
En un discurso ante el consejo de la ciudad de Florencia, hermanada con Kiev, Klitschko dijo que más de 20 cadáveres no pudieron ser identificados y que cuatro de las víctimas eran niños, en un momento en que otros 16 niños heridos están hospitalizados.
"Las ciudades en los alrededores de Kiev han visto numerosos combates; (...) en las carreteras vemos muchos cadáveres y trozos de cadáveres humanos", dijo Klitschko según un intérprete italiano.
El excampeón mundial de boxeo de pesos pesados dijo que 82 edificios de varios pisos en Kiev habían sido destruidos por los ataques rusos y que era imposible saber el verdadero número de muertos en la ciudad.
Ucrania y Rusia se preparaban el lunes para las primeras conversaciones de paz cara a cara en más de dos semanas, pero un alto responsable estadounidense dijo que el presidente ruso, Vladimir Putin, no parecía dispuesto a hacer concesiones para poner fin a la guerra.
Hasta ahora, Kiev se ha librado de la destrucción causada en ciudades del sur, como Mariúpol, donde han muerto más de 5.000 personas, según su alcalde.
Klitschko dijo que la toma de Kiev había estado entre los "principales planes" de Rusia al comienzo de su invasión, pero que ahora había sido bloqueada por la resistencia de Ucrania.
"Hemos destruido el mito del ejército ruso invencible. Estamos resistiendo contra la agresión de uno de los ejércitos más fuertes del mundo y hemos conseguido que cambien sus objetivos", dijo.
Klitschko hizo un llamamiento a los políticos italianos para que mantengan las sanciones contra Moscú y no crean lo que, según él, es propaganda rusa sobre la guerra.
"La desestabilización de nuestro país puede repercutir en todos los demás países europeos", dijo Klitschko.
Sin citar pruebas, dijo que el imperialismo ruso no se detendrá en Ucrania y advirtió que si no se le detiene ahora puede apuntar a Polonia, República Checa y Hungría.
Rusia califica sus acciones en Ucrania de "operación militar especial".