4 oct - Aunque el número de visitantes aún no se ha recuperado del todo a los niveles anteriores a la pandemia, los países mediterráneos están disfrutando de un impulso muy necesario, ya que la inflación y la fuerte recuperación del sector han elevado el gasto turístico y los ingresos fiscales de este año.
Esta tendencia positiva es uno de los factores que apoyan a las economías de la región, fuertemente endeudadas, en un momento en el que el aumento de los precios de la energía está afectando tanto a los consumidores como a las empresas.
España informó el lunes que recibió casi nueve millones de pasajeros a través de sus aeropuertos internacionales en agosto, cerca del 87% de los que llegaron en el mismo mes de 2019.
Sin embargo, el aumento de los precios hizo que el gasto de los turistas se situara en 11.260 millones de euros (11.160 millones de dólares), casi el doble de lo registrado en la misma época del año pasado y sólo un poco menos que en agosto de 2019.
España espera que los ingresos por turismo alcancen los 151.000 millones de euros este año, el 98% de los niveles previos a la pandemia, cuando la actividad turística hizo ganar al país 154.000 millones de euros, según Exceltur, que agrupa a las principales cadenas hoteleras, agencias de viajes, turoperadores y aerolíneas españolas.
El número de visitantes a la vecina Portugal superó en julio los niveles prepandémicos por primera vez desde el fin de la mayor parte de las restricciones del COVID-19, según el Instituto Nacional de Estadística (INE), con 1,8 millones de llegadas de extranjeros ese mes.
Esta recuperación, más el impacto de la inflación, contribuyó a un aumento del 21,6% de los ingresos fiscales, a 5.000 millones de euros.
La agrupación del sector turístico italiano Assoturismo calcula que 49 millones de turistas pasaron al menos una noche en un hotel durante el periodo estival de junio-agosto, lo que sigue siendo un 6,9% menos que en 2019.
Sin embargo, datos separados de la asociación de la industria turística Federturismo confirmaron el mismo patrón que en otros lugares: los ingresos de los turistas extranjeros durante el período casi volvieron a sus niveles anteriores a la pandemia del COVID-19, con una disminución de solo el 0,9% desde 2019.
El Ministerio de Finanzas de Grecia espera que los ingresos por turismo superen los 18.000 millones de euros este año, por sobre su récord de 2019. Los ingresos presupuestarios netos de los primeros ocho meses del año fueron de 39.000 millones de euros, unos 5.600 millones de euros por encima del objetivo, gracias a unos ingresos por turismo superiores a los previstos y a una mayor recaudación por IVA.
Sin embargo, el Gobierno conservador ha prometido destinar la mayor parte de la bonanza fiscal a las subvenciones energéticas.
(1 dólar estadounidense = 1,0088 euros)