Quizás no coincida con nuestra idea de un paisaje tropical… Pero es un paisaje tropical.
Pico Bolívar es la montaña más alta de Venezuela a casi 5.000 metros de altitud.
Hemos sido invitados a subir, pero no vamos andando. Tomamos el Teleférico de Mérida, en plena reconstrucción.
Vamos en el primer viaje del día, a las 5:00 a.m. para no interrumpir la complicada organización de esta obra única.
450 trabajadores cubren 24 horas luchando con las condiciones climáticas y la altitud.
Es la primera vez que un grupo de periodistas visita las obras.
Pico Espejo, la estación más alta, está a 4.800 metros, sólo diez por debajo del Mont Blanc, el techo de Europa Central.
Como el teleférico recorre un Parque Nacional, la reconstrucción se está llevando a cabo limitando al máximo el impacto ambiental.
La seguridad es otra prioridad y hasta la fecha no se han producido accidentes graves.
El Gobierno venezolano invierte 246 millones de euros en esta reconstrucción.
Jaime Bautista, coordinador de desarrollo turístico del Teleférico de Mérida explica que el objetivo va “mucho más allá de la inversión económica o de la proeza tecnológica” que supone la obra. “Este teleférico pretende crear conciencia ambiental, pretende estimular a los visitantes nacionales y extranjeros a que conozcan la naturaleza, a que se recreen con las modalidades de alta montaña y que disfruten de esta oportunidad única que les brinda Venezuela”.
Con la protección medioambiental por delante
La región de Mérida es uno de los destinos turísticos favoritos para los venezolanos. Cansados de las temperaturas tropicales les gusta subir al Páramo y pasar frío por unos días.
Con el nuevo teleférico, que abrirá sus puertas a finales de 2013, se espera atraer más turismo internacional.
La nueva ley de turismo del Gobierno Bolivariano intenta promover la creación de agencias turísticas comunales y un turismo sostenible.
En Mérida se lo han tomado al pie de la letra y los operadores que están entrando en el negocio turístico ponen el acento en que se disfruten sus tesoros naturales dentro del respeto al medio ambiente.
Además el Gobierno favorece el llamado “turismo social” que permite a las personas con pocos recursos disfrutar de temporadas de vacaciones. Muchos operadores turísticos venezolanos recuerdan con orgullo que el disfrute y el esparcimiento de la población están contemplados en la Constitución del país.
Algunos empresarios del sector establecidos desde hace tiempo celebran el avance de las obras del Teleférico de Mérida pero aseguran que hace falta mejorar el transporte. Sobre todo el aéreo.
Dimitri Duarte, presidente del Grupo Abadía y miembro de la Cámara de Turismo de Mérida lamenta que en en la ciudad andina se estén recibiendo apenas tres o cuatro vuelos al día. “Algunos días menos, tenemos un problema de capacidad para traer y sacar turistas desde Mérida, es una crítica constructiva que los empresarios hacemos a los entes del Estado, necesitamos mejorar el número de vuelos que vienen a Mérida” comenta.
Sin embargo otros empresarios de la región aseguran que la tranquilidad de la zona y su naturaleza han permanecido tan bien preservadas gracias a que las comunicaciones no son tan fluidas.
Por carretera se tarda en torno a doce horas en viajar de Mérida hasta Caracas. Algunas zonas son propensas a los deslizamientos de terreno.
El Gobierno promete mejorar las conexiones y como muestra de su compromiso con la región, el año que viene Mérida será la sede de la Feria Internacional de Turismo de Venezuela.
La edición 2012 de la FitVenha tenido lugar en la capital, Caracas, con un récord de 16 países invitados y cerca de 40.000 visitantes.
Rodeada de potencias turísticas, Venezuela ha olvidado durante mucho tiempo esta industria, como señala Carlos Vogeler, director para las Américas de la Organización Mundial del Turismo: _“Yo creo que el mayor enemigo que ha tenido el turismo en Venezuela ha sido el petróleo. Porque el petróleo ha aportado unas condiciones, y unas contribuciones al PIB, que quizás han relajado excesivamente al país, no buscando otro tipo de alternativas y por lo tanto, ese enemigo que ha sido el petróleo creo que está dejando de serlo”. Vogeler se felicita porque Venezuela esté prestando cada vez más atención al turismo y recuerda que el país “tiene un inmenso potencial”_.
El ministro venezolano de Turismo Alejandro Fleming explica cómo se está impulsando este “petróleo verde”. Uno de sus principales objetivos ha sido facilitar los préstamos a los empresarios turísticos a través de una cartera de crédito. “A día de hoy la tasa de interés en el sector turismo ha bajado gracias a la existencia de la cartera se encuentra ubicada en el 10,5 , que es una tasa muy ventajosa en Venezuela, incluso puede pasar al 7,5 en las zonas de interés turístico, y hemos pasado en apenas 12 años de 3.000 prestadores de servicios turístico a más de 14.000” comenta el ministro Fleming.
La voluntad de impulsar el turismo se ve también en Caracas.
Conocida como una de las capitales más violentas del mundo, las autoridades han creado una Guardia Patrimonial y están formando guías con los que se puede visitar el Casco histórico con toda tranquilidad.
Mérida. Galería de fotos
Enlaces:
Compañía de teleféricos venezolana:
Oficina de turismo:
Operador turístico estatal Venetur: