“Este es un día cualquiera laborable, aquí en Atenas. Grecia sigue en crisis. El país afronta agobiantes deudas, un alto desempleo y la llegada
PUBLICIDAD“Este es un día cualquiera laborable, aquí en Atenas. Grecia sigue en crisis. El país afronta agobiantes deudas, un alto desempleo y la llegada diaria de refugiados. Todo ello tiene un impacto en el sector de la salud. Hablaremos con el Ministro de Sanidad sobre sus planes, pero primero vayamos al encuentro de médicos y pacientes.”
En el Hospital Genimata, en Atenas, nos reunimos con la doctora Matina Pagoni, presidenta de la Unión de Médicos de Hopitales de Atenas, y con Christos Daramilas, presidente de la Asociación de diabéticos griegos.
Matina Pagoni, presidenta de la Unión de Médicos de Hopitales de Atenas:
“La situación en Grecia es muy difícil. Hacen falta médicos y personal de enfermería. Debería haber nueva contratación y más financiación para material médico en los hospitales, porque ahora estamos al límite."
“Christos, como paciente, ¿qué opina del sistema sanitario?”
“La situación es grave, asegura Christos Daramilas. Muchos pacientes con enfermedades crónicas no tienen citas médicas regulares a tiempo, sino que tienen hasta 9 ó 10 meses de lista de espera.”
En este contexto, el Gobierno ha de lidiar con otro problema, pues acaba de aprobar una ley que ofrece asistencia sanitaria gratuita a los refugiados y a los hogares con ingresos más bajos. Los detractores de esta ley creen que fomentará la economía subterránea. Para el ministro de Sanidad, Andreas Xanthos es una cuestión de principios.
Andreas Xanthos, ministro griego de Sanidad:
“La atención médica es un derecho que, como país moderno y bien gobernado, debemos ofrecer a todos por igual, independientemente de su seguro, trabajo o nivel de ingresos. En este sentido, y debemos insistir mucho en ello, no creo que con esta ley fomentemos ni el trabajo en negro, ni el fraude o la evasión fiscal.”
Al ofrecer cobertura médica a más personas, ¿cómo gestionar esta nueva situación?
“Creemos que cumplimos con las condiciones financieras para estabilizar poco a poco el funcionamiento del sistema sanitario, mejorar sus servicios, y hacer frente a gastos adicionales que se producirán como consecuencia de esta legislación.”
“¿Son suficientes las reformas del Gobierno? ¿O se trata apenas de una reforma marginal en un sistema que requiere cambios mucho más profundos? Veamos la opinión de un segundo experto.”
El experto en sistemas sanitarios, Kyriakos Souliotis cree que Grecia debería suspender tanto las cotizaciones empresariales como las retenciones a los empleados para financiar la Seguridad Social.
“Sabemos que necesitamos un cambio profundo en nuestro sistema, aunque parece que están estudiando cada día su viabilidad, reflexiona el profesor Souliotis de la Universidad del Peloponeso. Deberíamos pasar a un sistema basado en un impuesto generalizado, como el que tienen, por ejemplo, en el Reino Unido y los países escandinavos, solo así podríamos tener la certeza de poder “garantizar” una cobertura universal “.
De vuelta al hospital, quienes requieren atención médica diaria, coinciden en que hay que invertir más, independientemente del sistema de financiación.
“El Gobierno debe ayudar a los hospitales y proporcionar la financiación necesaria, pues siempre se trata de una cuestión económica, sentencia Christos Daramilas, presidente de la Asociación de diabéticos griegos. Faltan enfermeros y personal médico especializado que dirija todo el sistema y, en particular, en los hospitales de nuestro país para evitar el colapso.”
Se estima que una reforma sistémica de la atención sanitaria griega llevaría 5 años, con un coste del 6% del PIB.