La élite del ajedrez se dio cita en Batumi, Georgia
PUBLICIDADBatumi en Georgia fue la sede de la 43ª Olimpiada de Ajedrez. Aparte de ser un potente destino turístico, en la ciudad se celebran importantes eventos deportivos y culturales. Durante 12 días, leyendas del ajedrez y nuevos talentos mostraron su mejor versión para intentar ganar la mayor distinción, una medalla en la Olimpiada.
Para el equipo georgiano fue un momento único. Nino Batsiashvili es miembro del equipo que ganó la medalla de oro en el Campeonato del Mundo por equipos en 2015. La jugadora de 31 años se siente orgullosa de que la Olimpiada se celebre en su país.
Nino Batsiashvili - Gran maestra de ajedrez: «Esta es la primera vez que Batumi acoge un evento de tanto nivel. Para nosotros era muy importante jugar bien. Ha sido un gran tutorial porque siempre prestamos atención, aprendemos lecciones de otros jugadores. Por supuesto, nosotros también compartimos nuestros conocimientos con nuestros colegas extranjeros en algún momento. Un jugador de ajedrez debe entrenarse diariamente. Tenemos que encontrar nuevas combinaciones, nuevas ideas y tácticas para utilizarlas en futuras competiciones y partidas».
En la categoría femenina, el equipo georgiano ganó la medalla de bronce. China se hizo con dos medallas de oro en abierto y femenino.
La 43ª Olimpiada de Ajedrez en números
- 185 equipos
- 920 jugadores
- 1837 partidos
-Más de 4000 invitados
Apostolos Staikos, Euronews: «Hay que estar muy callado en esta sala y aquí no se permiten los teléfonos móviles. También hay que ser muy paciente si se quiere saber quién es el ganador, porque algunos partidos duran hasta seis horas. El ajedrez exige concentración, una buena estrategia y una mente despejada»
En la Olimpiada de Ajedrez de este año, un equipo de cine empezó a grabar ‘‘The Encounter’’. Es un documental sobre el reencuentro del equipo de ajedrez femenino de la Unión Soviética desde los años 60 a los 80.
Las cuatro jugadoras georgianas volvieron a verse después de casi 30 años. Son Nona Gaprindashvili, Nana Alexandria, Maia Chiburdanidze y Nana Ioseliani. Estuvimos con Nona Gaprindashvili. Fue la primera mujer galardonada con el título de Gran Maestro Absoluto. Mientras recuerda los viejos tiempos, se da cuenta de que las nuevas jugadoras compiten en un entorno diferente.
Nona Gaprindashvili - Cinco veces campeona del mundo: «Los ordenadores lo han cambiado todo y actualmente el público prefiere sentarse delante del ordenador y ver las partidas a través de internet. Esto nos ha arrebatado a nuestros espectadores en los salones de ajedrez. En el pasado, nuestros torneos y competiciones se retransmitían en cines y teatros y siempre se llenaban las salas. La gente incluso se quedaba de pie fuera de los auditorios mientras esperaba los resultados».
La 43ª Olimpiada de Ajedrez empezó con una ceremonia de inauguración espectacular en el Mar Negro Arena. Contó con las actuaciones de un DJ, de la Orquesta Sinfónica Estatal y del Ballet Nacional Georgiano. La ceremonia de clausura se celebró en el Batumi State Music Center. Las autoridades locales quieren convertir la ciudad en un imán para los visitantes extranjeros.
Tornike Rijvadze - Presidente del Gobierno de Ayaria: «Nuestra ambición es hacer de Batumi y Ayaria un destino turístico para todo el año. Para eso hemos invertido mucho. Nos hemos esforzado mucho para crear infraestructuras y seguimos mejorando paulatinamente nuestros servicios y productos turísticos»
Para la FIDE el objetivo no solo es contar con torneos y eventos internacionales de éxito, sino además crear una nueva generación de amantes del ajedrez por todo el globo.
Zurab Azmaiparashvili - Presidente de la Unión Europea de Ajedrez: «El ajedrez debería convertirse en una parte del sistema educativo en todo el mundo. Queremos crear una nueva generación de jugadores de ajedrez que utilicen los conocimientos de ajedrez en sus vidas privadas».
Una cosa es cierta. A la gente en Batumi le encanta el ajedrez. Incluso los niños pequeños, después de la escuela, corren al centro de la ciudad para jugar al ajedrez, aunque no siguen necesariamente las reglas del juego.