Reciclar hasta el infinito y más allá. Nos fijamos en Italia para ver cómo las empresas de la industria textil, desarrollan formas innovadoras de reducir el material que se desecha.
Reciclar hasta el infinito y más allá. Hemos ido a Italia para ver cómo las empresas de la industria textil del país desarrollan formas innovadoras de reducir el material que se desecha. A diferencia del modelo tradicional de materia prima-fabricación-eliminación, requiere de un enfoque diferente, uno en el que los recursos que usamos permanecen dentro de un ciclo cerrado. Así que no se tira nada.
Fundada hace casi 100 años cerca de Monza, Pàra, es una industria textil que fabrica toldos acrílicos y muebles de jardín. La empresa se enorgullece de su trauectoria y de la calidad de sus productos, algunos de los cuales adornaron la Casa Blanca durante la presidencia de Barack Obama. Pero también es plenamente consciente del coste medioambiental que tiene la fabricación textil en el planeta.
Su consejero delegado, Matteo Parravicini, hace recuento:“Parà siempre ha seguido una política de respeto a los recursos naturales; de hecho Parà ha invertido en una planta de tratamiento de aguas residuales, una central de cogeneración para obtener agua caliente y vapor para sus instalaciones, y una central fotovoltaica para obtener energía solar limpia. Eso es Parà".
La empresa también busca cómo recuperar y reutilizar productos usados de los clientes una vez que hayan llegado al final de su vida útil.
Parravicini entiende que reciclar_“Es importante porque sé que no tenemos un planeta B y sé que nuestros procesos tienen un impacto en el medio ambiente. En este punto, la búsqueda de productos sostenibles se convierte en la verdadera clave del futuro. Nuestro mercado exige que las empresas inviertan en este campo”.
Pero unir los diferentes elementos para cerrar el ciclo de la economía circular será difícil de conseguir.
En estos momentos se estima que se recicla menos del uno por ciento de todos los desechos textiles en el mundo.
Uno de los mayores desafíos para el reciclaje de telas usadas es eliminar las sustancias de acabado, especialmente del acrílico.
Pero Pàra y Centrocot, otra empresa italiana, creen que tienen la respuesta. La investigación está respaldada por el proyecto de la Unión Europea Horizont 2020 React.
Lucha contra los tintes acrílicos
Roberto Vannucci es gerente de Investigación e Innovación de Centrocot participa en la coordinación del proyecto REACT. ¿Cómo aborda el problema de los residuos textiles acrílicos?
- R.V.: "Los tejidos acrílicos tienen sustancias químicas que les hemos añadido para obtener propiedades específicas, como características antimicrobianas. Sin embargo, estas sustancias pueden ser peligrosas, especialmente para el medio ambiente, y deben eliminarse. Y eso es lo que estamos haciendo".
- ¿Esta tecnología cómo podría llevar a la industria textil a un modelo más circular?
- R.V.: "En lugar de tirarlas a un vertedero o quemarlas, será posible reciclar y reutilizar fibras acrílicas para producir nuevos tejidos o nuevos productos. No solo eso, el mismo enfoque también podría usarse para otros tejidos compuestos por otras fibras".
Este año, como parte de su Pacto Verde, la Comisión Europea presentó su Plan de Acción de Economía Circular. La estrategia busca fortalecer la innovación en el sector textil e impulsar decididamente la recogida, la reutilización y el reciclaje.