Por Lucia Mutikani
WASHINGTON, 5 oct - El déficit comercial de Estados Unidos alcanzó un récord en agosto, impulsado por importaciones de las empresas para reponer sus inventarios, la más reciente señal de que el crecimiento económico se desaceleró en el tercer trimestre.
La brecha comercial se disparó un 4,2% a 73.300 millones de dólares el mes pasado, el más alto desde que el gobierno comenzó a hacer un seguimiento, informó el martes el Departamento de Comercio. Economistas encuestados por Reuters habían previsto un alza a 70.500 millones de dólares.
Si se ajusta a la inflación, el déficit comercial de bienes aumentó 1.900 millones de dólares a 101.800 millones en agosto. El informe se conoce después de que el viernes pasado datos del gobierno mostraron que inflación redujo drásticamente el gasto de los consumidores en julio, con un repunte moderado en agosto.
La Reserva Federal de Atlanta prevé que el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) se frene a una tasa anualizada del 2,3% en el tercer trimestre, frente al 6,7% del segundo trimestre.
El comercio exterior he recortado el crecimiento del PIB durante cuatro trimestres consecutivos.
Las importaciones de bienes aumentaron un 1,1% a 239.100 millones de dólares en agosto, encabezadas por los bienes de consumo, pero también crecieron las compras al exterior de suministros y materiales industriales.
Sin embargo, las importaciones de vehículos de motor, piezas y motores disminuyeron en 1.500 millones de dólares, como consecuencia de la escasez mundial de semiconductores, que está dificultando la producción.
La demanda de bienes sigue siendo fuerte, pese a que el gasto se está moviendo a los servicios, como los viajes, a medida que más personas se vacunan contra el COVID-19.
Las importaciones de servicios aumentaron 1.300 millones de dólares a 47.900 millones en agosto. En general, las importaciones se dispararon un 1,4% a 287.000 millones de dólares, la mayor cifra de la que se tenga registro.
Las exportaciones de bienes aumentaron un 0,7% a récord de 149.700 millones de dólares. Los envíos se vieron impulsados por los suministros industriales y materiales, como el oro no monetario y el gas natural, pero las ventas de vehículos de motor, piezas y motores al extranjero disminuyeron, así como las de bienes de capital.