2 feb - El principal índice bursátil español cerró en rojo el miércoles tras dos jornadas en positivo, arrastrado por los datos macro de la jornada que pusieron en duda la recuperación económica y alimentaron el temor ante la inflación.
Después de que los datos de ADP quedaran el miércoles largamente por debajo de las previsiones, los grupos más sensibles a la economía, se han visto afectados a escala mundial.
La cifra no alcanzó el aumento de 207.000 puestos de trabajo que esperaban los analistas, siendo el aumento de las infecciones de la variante ómicron el factor más probable de perturbación.
"Es probable que los efectos de ómicron distorsionen los datos del BLS (Bureau of Labor Statistics, por sus siglas en inglés) de enero, dado que un elevado número de infecciones provocó perturbaciones generalizadas", escribió Rubeela Farooqi, economista jefe de Estados Unidos en High Frequency Economics.
"Dependiendo de la magnitud, es probable que la Fed pase por alto cualquier debilidad, dado que las interrupciones relacionadas con el virus se consideran transitorias", añadió.
El récord alcanzado en la misma jornada por la inflación de la eurozona afectó también a las plazas europeas, mientras el euro se reforzaba ante las mayores expectativas de que el Banco Central Europeo apunte en su reunión del jueves a un endurecimiento más rápido de su política monetaria.
En este contexto, el selectivo bursátil español Ibex-35 cerró con una caída de 13,50 puntos el miércoles, un 0,15%, hasta 8.713,20 puntos, mientras que el índice de grandes valores europeos FTSE Eurofirst 300 subió un 0,47%.
En el sector bancario, Santander subió un 0,32%, BBVA se anotó un 1,04%, Caixabank no mostró cambios, Sabadell ganó un 1,37%, y Bankinter se dejó un 0,38%.
Entre los grandes valores no financieros, Telefónica se anotó un 0,98%, Inditex cedió un 2,29%, Iberdrola se dejó un 0,69%, Cellnex ganó un 2,75% y la petrolera Repsol perdió un 0,53%.