Por David Gaffen
16 mar - El petróleo perdió terreno el miércoles, por quinta vez en las últimas seis sesiones, ya que los operadores reaccionaron a avances en las conversaciones de paz entre Rusia y Ucrania y a un sorpresivo aumento de los inventarios en Estados Unidos.
* El mercado del petróleo lleva más de dos semanas en una montaña rusa, y los dos principales contratos de referencia se han movido en los últimos 30 días en un rango más amplio que en cualquier otro momento desde mediados de 2020.
* El miércoles no fue diferente, ya que el referencial mundial Brent cotizó en un horquilla de 6 dólares, entre 97,55 dólares y 103,70 dólares, antes de cerrar en 98,02 dólares el barril, con un descenso de 1,89 dólares por barril, o un 1,9%.
* El crudo estadounidense West Texas Intermediate (WTI) en Estados Unidos terminó con un descenso de 1,40 dólares, o un 1,5%, a 95,04 dólares el barril.
* El frenético repunte de la semana pasada hizo que el Brent superara brevemente los 139 dólares por barril, debido a la preocupación por el suministro ruso. El Brent está ahora más de 40 dólares bajo ese punto y algunos analistas han advertido que esto refleja demasiada confianza en un pronto fin de la guerra.
* Estados Unidos y otros países han impuesto fuertes sanciones a Rusia desde que invadió Ucrania hace tres semanas. Esto ha interrumpido el comercio de petróleo de Rusia, cercano a 4 millones a 5 millones de barriles de crudo diarios.
* El Brent subió un 28% en seis días y luego cayó un 24% en las seis sesiones siguientes, contando el miércoles.
* Varios factores han impulsado el cambio de tendencia, entre ellos las modestas esperanzas de un acuerdo de paz entre Rusia y Ucrania y las débiles señales de avance entre Estados Unidos e Irán para resucitar un acuerdo de 2015, que permitiría a la República Islámica exportar petróleo.
* Se espera que la demanda china se ralentice debido a un aumento de los casos de coronavirus en ese país, aunque las cifras mostraron un menor número de nuevos casos y las esperanzas de estímulo chino impulsaron las acciones.
* Los inventarios estadounidenses crecieron 4,3 millones de barriles, en contra de las expectativas de una caída, mientras que las existencias en el centro de distribución de Cushing, Oklahoma, también aumentaron, aliviando un poco la preocupación por el bajo nivel.
* La Reserva Federal subió las tasas de interés en Estados Unidos por primera vez en poco más de tres años -en un cuarto de punto porcentual- tal y como se preveía. La trayectoria básica del mercado del petróleo no cambió tras la noticia.