22 jul - Las bolsas europeas se estabilizaban el viernes tras la fuerte subida de los tipos de interés del Banco Central Europeo el día anterior y el colapso del Gobierno de Italia, pero seguían en camino de lograr su mayor ganancia semanal en dos meses.
El índice paneuropeo STOXX 600 se mantenía plano, ya que las subidas de las acciones del sector energético compensaban las pérdidas de la mayoría de los demás sectores en las primeras operaciones de la sesión. El índice terminó el jueves al alza tras una sesión volátil.
Los mercados se agitaron después de que el BCE subiera los tipos de interés en 50 puntos básicos, más de lo inicialmente previsto, mientras que los escasos detalles de un instrumento para controlar las crecientes diferencias entre los bonos del centro y la periferia de la eurozona dejaron a los inversores poco satisfechos.
Las acciones italianas bajaban un poco, tras una tumultuosa sesión el jueves en la que el país se preparó para unas elecciones nacionales anticipadas el 25 de septiembre, después de que el primer ministro Mario Draghi dimitiera tras el colapso de su Gobierno de unidad nacional.
Sin embargo, en la semana las principales bolsas europeas se dirigen a registrar alzas gracias a la disminución de los temores sobre una crisis de suministro energético, después de que el flujo de gas ruso hacia Europa se reanudara tras una interrupción programada por mantenimiento.
Danske Bank caía un 2,6% tras recortar dividendos, mientras que el fabricante suizo de ascensores y escaleras mecánicas Schindler caía un 4% tras recortar las previsiones de ingresos para 2022.
El fabricante de aluminio Norsk Hydro subía un 4,1% tras proponer un dividendo adicional y ofrecer una recompra de acciones.
La aseguradora de Beazley, de Lloyd's, se situaba a la cabeza del STOXX 600 tras elevar sus perspectivas de rentabilidad para todo el año.