SAO PAULO, 30 ene - Los agricultores brasileños cosecharon el 5% del área sembrada de soja en el ciclo 2022/23 hasta el jueves pasado, dijo el lunes la consultora de agronegocios AgRural, 3 puntos porcentuales más que la semana anterior, pero aún por debajo de los niveles del año pasado.
En la misma época de 2022, se había segado el 10% de los campos de soja brasileños, dijo AgRural, que actualmente espera que la cosecha de esta temporada alcance los 152,9 millones de toneladas, pero ya insinúa posibles recortes de rendimiento a futuro.
Las lluvias irregulares han perjudicado a las áreas de soja en Rio Grande do Sul, el estado más meridional de Brasil, y deberían llevar a AgRural a reducir aún más sus estimaciones de rendimiento para la región en las próximas actualizaciones de los cultivos, dijo la consultora en un comunicado.
El retraso anual de la cosecha, añadió AgRural, se produce cuando el principal estado productor de grano, Mato Grosso, se enfrenta a una falta de sol entre los períodos de lluvia, creando un clima "invernal". El trabajo de campo también se ha retrasado en otros estados, incluido Paraná.
A pesar de la producción récord prevista para esta temporada, según la empresa, el volumen cosechado hasta ahora se acerca a los 8 millones de toneladas, por debajo de los 13 millones de toneladas de hace un año, cuando Brasil se enfrentó a una pérdida de cosecha.
La estimación de cosecha de AgRural coincide con la de otras consultoras privadas, incluyendo Patria AgroNegocios y Safras & Mercado, que proporcionaron nuevas cifras el viernes.
Con el retraso de la cosecha de soja, la siembra de la segunda cosecha de maíz de Brasil también estuvo por debajo de los niveles del año pasado, alcanzando el 5% de la superficie prevista hasta el jueves, dijo AgRural, por debajo del 14% en el mismo momento en 2022.
"El retraso aún no amenaza la ventana de siembra de maíz, pero es importante que a partir de principios de febrero avance más rápidamente", dijo la consultora.
Los agricultores de Brasil normalmente siembran su segunda cosecha de maíz, que representa entre el 70% y el 75% de la producción nacional en un año determinado, después de cosechar la soja.