En la cumbre de este viernes, los jefes de Estado y de Gobierno empiezan a negociar los próximos presupuestos comunitarios. Y, con el "brexit" en el horizonte, se plantean dos opciones: aportar más dinero o recortar en las políticas agrarias y de cohesión.
PUBLICIDADBruselas se ha marcados tres nuevas prioridades: reforzar la defensa, mejorar el control de las fronteras y reorganizar los flujos migratorios. Y estas tres prioridades van a tener que encontrar financiación en el próximo marco presupuestario de la Unión Europea.
Los jefes de Estado y de Gobierno europeos celebran este viernes una cumbre para analizar la cuestión y Alemania, el principal contribuyente a los presupuestos comunitarios, ya ha dejado clara su posición. "Cuando se decida el reparto de los fondos estructurales, tendremos que asegurarnos de que refleja el compromiso de las regiones receptoras con la integración de inmigrantes", ha dicho la canciller alemana Angela Merkel.
El problema es que con el brexit, los presupuestos sufrirán una pérdida de diez mil millones de euros. Y para compensar, la Comisión Europea propone: bien incrementar las aportaciones de cada estado, bien recortar en la Politica Agrícola Común y en los Fondos de Cohesión.
Pero esta no es la única cuestión peliaguda. Por primera vez se habla de castigar a los países que incumplen, cortándoles ciertos fondos. Hungría y Polonia estarían en el punto de mira. "La palabra es condicionalidad", explica el analista político Charles de Marcilly de la Fundación Robert Schuman. "Europa no es sólo dar y recibir, también hay que respetar el estado de derecho y la unidad de Europa. Y eso puede implicar forzar la mano para dejar claro que Europa no es sólo un supermercado".
En la cumbre también se hablará de las próximas elecciones europeas. La Eurocámara votó recientemente a favor de que los partidos políticos designen a su candidato para presidir la Comisión Europea. Pero según de Marcilly, "ciertos gobiernos no quieren estar atados de pies y manos a la hora de decidir". Y es que según los Tratados de la Unión, los gobiernos reunidos en el Consejo son los encargados de nombrar al presidente de la Comisión Europea.