Paradojas y disturbios en la inauguración, este viernes, de la Exposición Universal de Milán. Bajo el lema “Alimentar al planeta, energía para la
PUBLICIDADParadojas y disturbios en la inauguración, este viernes, de la Exposición Universal de Milán.
Bajo el lema “Alimentar al planeta, energía para la vida”, se centrará en la producción sostenible de alimentos y debatirá cómo erradicar el hambre en el mundo.
Servirá también para que el primer ministro italiano Mateo Renzi presente una imagen de recuperación económica tras años de recesión.
“Hoy comienza el mañana. Empezando con las contradicciones de un planeta que necesita ser alimentado pero que vive el desequilibrio absurdo de mil millones de personas que continúan muriendo de hambre y otros mil millones que sufren por comer demasiado o alimentarse mal”.
El Papa Francisco, en vídeoconferencia desde el Vaticano, hizo hincapié en otra paradoja.
“La expo es una oportunidad ideal para globalizar la solidaridad. Intentemos no desperdiciarla sino valorarla plenamente”.
Añadió que es una ironía que este megaespectáculo que depende del patrocinio de empresas privadas esté dedicado a cómo alimentar a los pobres.
Varios de sus responsables han sido detenidos por corrupción.
En la expo participan más de 140 países distribuidos en ochenta pabellones.
Durará seis meses, en los que se espera recibir a veinte millones de visitantes, que dejarían unos diezmil millones de euros.
Entre las manifestaciones pacíficas contra el evento se han colado grupos antisistema que han lanzado objetos contra la policía e incendiado vehículos.
Fueron reducidos con mangueras de agua y gases lacrimógenos.