Cuatro años después de la masacre perpetrada por el ultraderechista Anders Behring Breivik, más de mil jóvenes han vuelto a la isla noruega para
PUBLICIDADCuatro años después de la masacre perpetrada por el ultraderechista Anders Behring Breivik, más de mil jóvenes han vuelto a la isla noruega para participar en el campamento estival de las Juventudes Laboristas. Una cifra récord de asistentes con la que los noruegos quieren cerrar una de las páginas más negras de su historia reciente.
Entre los participantes se encuentran algunos de los que se encontraban en la isla ese 22 de julio de 2011.
“He estado comprometido con esto durante muchos años, pero el ataque fue como una enorme bofetada en la cara y ahora sentimos que, de alguna forma, tenemos que hacer algo. Creo que todo el mundo piensa que tiene que hacer algo”, decía un joven.
Ese día y después de hacer estallar una furgoneta en Oslo, Breivik irrumpió en Utoya, propiedad del Partido Laborista, y disparó indiscriminadamente a los asistentes durante cerca de una hora. 69 personas, en su mayoría jóvenes, fallecieron por los disparos.
Este viernes, también ha estado en la isla el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, primer ministro cuando ocurrió la masacre.
Great to wake up at Utøya, and to be together with so many engaged young people. pic.twitter.com/dWrFVZvwMU
— Jens Stoltenberg (@jensstoltenberg) agosto 7, 2015
El campamento, que esta vez cuenta con vigilancia policial, se prolongará hasta el domingo.