Victor Orban, primer ministro húngaro considera que la crisis migratoria es un problema que atañe únicamente a Alemania, no a la Unión Europa. Ante
PUBLICIDADVictor Orban, primer ministro húngaro considera que la crisis migratoria es un problema que atañe únicamente a Alemania, no a la Unión Europa.
Ante la atónita mirada de Martin Schulz, presidente del Parlamento Europeo, Orban, se ha mostrado este jueves contundente en una rueda de prensa conjunta desde Bruselas: “El problema no es europeo. El problema es alemán. Nadie quiere quedarse en Hungría. Nosotros no tenemos dificultades con los que quieran quedarse en Hungría. Nadie quiere quedarse en nuestro país, ni en Eslovaquia, ni en Polonia, ni en Estonia. Todos ellos quieren irse a Alemania. Nuestro trabajo consiste únicamente en registrar sus nombres”.
Al margen de los esfuerzos que se están planteando desde las instituciones europeas para lograr una solución, Hungría ha decidido actuar por libre: endurecerá su legislación respecto a la llegada de inmigrantes y reforzará sus fronteras con dos mil policías adicionales.