Las altas temperaturas y alguna demora a la entrada del estadio han sido los únicos inconvenientes durante la primera jornada de los Juegos Olímpicos de Río de…
PUBLICIDADLas altas temperaturas y alguna demora a la entrada del estadio han sido los únicos inconvenientes durante la primera jornada de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. Unos 85.000 agentes de seguridad vigilan el evento, más del doble que en Londres 2.012.
Los horas muertas han sido utilizadas por los aficionados para inmortalizar el momento en entorno desenfadado como demuestran las palabras de algunos de ellos: “Estoy en los Juegos Olímpicos por primera vez, siempre he soñado con estar aquí, así que es un sueño hecho realidad. Hasta ahora todo ha estado muy bien organizado, los autobuses y los trenes funcionan, no se tarda demasiado en los cacheos…Hace bastante calor, pero todo está yendo bien.”
Ya está abierta la línea cuatro de metro que se finalizó la pasada semana y que conecta la zona de hoteles con el Parque Olímpico. Solo los poseedores de entradas pueden utilizarla y una vez en destino, hay que completar el traslado en un autobús.
“Ha sido muy fácil para nosotros. Nuestro hotel está a dos manzanas de la parada de metro y estamos con un gran grupo que nos dijo cómo desplazarnos. Mucha gente, pero era lo esperado”, explica uno de los asistentes.
Los organizadores han pedido disculpas por las largas colas que se han formado durante algún tiempo para acceder al estadio. Cerca de 500.000 turistas extranjeros se han desplazado hasta Brasil para disfrutar de los Juegos Olímpicos.