Los primeros espadas del Partido Socialista francés han hecho una pausa en el duelo por liderar la candidatura a la Elección Presidencial 2017 tras el anuncio de François Hollande de que no se present
PUBLICIDADLos primeros espadas del Partido Socialista francés han hecho una pausa en el duelo por liderar la candidatura a la Elección Presidencial 2017 tras el anuncio de François Hollande de que no se presentará a la reelección, una decisión inédita en la V República francesa.
Francia es una de las potencias mundiales de la esgrima y, con deportividad de esgrimista, los líderes del partido han reconocido el gesto “valiente” y “lúcido” de un Hollande que tenía pocas probabilidades de ganar, tanto dentro del partido en las primarias como en una hipotética batalla presidencial.
El primer ministro Manuel Valls ha reconocido “una elección difícil, madurada, grave. La decisión de un hombre de Estado”. Declarando a François Hollande su “emoción, mi respeto, mi fidelidad y mi afecto. Como ministro del Interior, conozco su valentía, su sangre fría, la de un gran dirigente que ha sabido afrontar pruebas dolorosas para Francia” ha dicho a través de un comunicado.
La tensión entre el presidente y su primer ministro por la posibilidad de que ambos fueran candidatos en 2017 —que también habría sido una situación inédita en la V República— llegó a su culmen el pasado fin de semana cuando Valls declaró en una entrevista que no descartaba presentarse contra Hollande en las primarias de enero.
La prudente retirada de Hollande no significa que Valls tenga el camino fácil. El ministro de Agricultura y portavoz del Gobierno Stéphane Le Foll ya ha advertido esta misma mañana que Valls tiene todo el derecho de ser candidato, pero que no puede mantener su cargo de primer ministro.
Bernard Cazeneuve ministro del Interior que ha tenido que gestionar junto a Hollande los peores atentados de la historia de Francia (Charlie Hebdo, Paris 13-N, Niza…) ha dicho sentir una profunda emoción y un gran orgullo por el gesto de Hollande. Según Cazeneuve significa que “prefiere su país, el Estado, el sentido del servicio público, la unidad a cualquier interés personal” ha comentado. Arnaud Monteburg, exministro de Economía y uno de los primeros candidatos a las primarias socialistas ha felicitado a Hollande por una decisión “difícil y muy valiente”, que, en su opinión, “permite a la izquierda prepar con serenidad su futuro, que comienza hoy con las primarias”. > Je salue la décision sage, réaliste et lucide de François #Hollande. Une décision qui permet à la #Gauche de préparer son avenir. pic.twitter.com/uZYeBH9FVT
— Arnaud Montebourg (@montebourg) 1 de diciembre de 2016
Benoît Hamon, el otro candidato “fuerte” de la izquierda en las primarias ha valorado la “lucidez” y la “humildad” de alguien que sabía que no podía unir a su bando. > #RTLMatin : François Hollande ne pouvait plus rassembler son camp, il en a tiré la conséquence avec humilité et lucidité.
— Benoît Hamon (@benoithamon) 2 de diciembre de 2016
Juliette Méadel, secretaria de Estado para la ayuda a las víctimas se ha desecho en elogios, declarando su emoción y su tristeza, y celebrando una decisión “digna de un gran presidente de la República que marcará a las futuras generaciones en su relación con el poder”. > J'espère que certains vont avoir un sentiment de culpabilité, en particulier les frondeurs qui ont détruit plus que construit. #Hollandepic.twitter.com/3sBcNhmwVG
— Juliette Méadel (@juliettemeadel) 2 de diciembre de 2016
También ha denunciado “cinco años de Hollande bashing, el acoso político a Hollande, y la actitud de los frondeurs los diputados socialistas rebeldes, que considera “irresponsable y que ha abocado a la mayoría parlamentaria a sufrir la actual situación”.
Uno de los principales representantes de estos diputados frondeurs,Christian Paul, no ha suavizado su tono crítico con François Hollande en su artículo publicado en la versión francesa del Huffington Post. “La decisión de Hollande es “una suerte para las primarias de la izquierda y para la democracia”. Sin embargo afirma no alegrarse personalmente ni quere apuntarse ningún tanto, solo el de haber visto venir antes que otros la “catástrofe política” que se avecinaba para los socialistas.
Le choix de François Hollande, une chance pour la primaire à gauche et la démocratie. À chacun ses responsabilités. https://t.co/UJplFPbEoA
— Christian Paul (@christianpaul58) 2 de diciembre de 2016
Sin ser considerado un frondeur (porque entre otras cosas no ha votado contra las iniciativas del Gobierno)_ Claude Bartolone ha sido una de las bestias negras de Hollande. Su relación se deterioró cuando el presidente puso en duda su capacidad en su polémico libro “Cosas que un presidente no debería decir”. Bartolone sembró la polémica rompiendo el tabú diciendo que deseaba que Hollande y Valls se enfrentaran en las primarias.
Hoy publicaba un elogioso artículo en su página web en el que celebraba un gesto de “dignidad y responsabilidad” y una “decisión difícil” que inspira “respeto”.
Con esta decisión “tomada en nombre del interés superior del país considera que Hollande lega a los socialistas y a la izquierda la inmensa responsabilidad de posicionarse al nivel apropiado”.
La carismática exministra de Justicia Christiane Taubira, que algunos ven como la candidata soñada de la izquierda ha felicitado a Hollande en Twitter por “un momento de diginidad como se ven pocos en política”. Añadiendo que “la exigencia para las izquierdas es colosal”.
Un moment de dignité comme la politique en était devenue avare. L'exigence pour les gauches est colossale.
ChT— Christiane Taubira (@ChTaubira) 1 de diciembre de 2016
Emmanuel Macron, que dejó el ministerio de Economía para proclamarse candidato de centro habló de una decisión “valiente” y “digna”, en una entrevista radiofónica. El ministro de Exteriores y exprimer ministro Jean-Marc Ayrault considera que es una decisión motivada solamente por el “interés superior de Francia”.
La izquierda carga contra el arbol caído
El candidato de la izquierda Jean-Luc Mélenchon ha dicho que con su retirada Hollande ha evitado una especie de “crucifixión de cinco meses”. Añadiendo que es la gigantesca confesión de un fracaso, y no debería funcionar como una amnistía para todos los que han participado en este fracaso”.
Preguntado por su valoración del gesto, ha dicho que no es asunto suyo. “Tomó las riendas del país en ciertas condiciones y con un programa, no lo ha aplicado y ha desorganizado completamente a los de su bando”.
El Partido Comunista también ha criticado la traición a la izquierda que ha supuesto el mandato de Hollande. “No se puede renunciar impunemente a los valores de izquierda” ha dicho Olivier Dartigolles.