A punto de acabar el año, miramos hacia atrás para repasar algunos de los mayores cambios económicos de 2016.
PUBLICIDADA punto de acabar el año, miramos hacia atrás para repasar algunos de los mayores cambios económicos de 2016. Durante este año, la Reserva Federal estadounidense y el Banco de Inglaterra ya han experimentado el impacto que representa el cambio de paisaje político.
Algo a lo que el Banco Central Europeo podría hacer frente en 2017. Sus responsables podrían verse obligados a ajustarse a una nueva realidad y a unos electores con unos patrones mucho más impredecibles.
Es por lo que desde el BCE se continúa advirtiendo sobre la incertidumbre y hay una resistencia a ofrecer unas previsiones económicas claras. Lo que hace más difícil que se concentre solo en la estabilidad de los precios. Un reto para el organismo para los próximos doce meses.