Líderes políticos y militares iraquíes han proclamado la liberación completa del este de Mosul.
Líderes políticos y militares iraquíes han proclamado la liberación completa del este de Mosul. La imagen que corrobora sus palabras es la de los niños regresando a los colegios después de más de dos años en los que estos barrios y la vida de sus habitantes han estado en manos del grupo Estado Islámico.
“Nos enseñaban cosas como sumar balas, una bala más una bala, una bomba más una bomba… Aprendíamos cosas muy diferentes”, dice una niña.
Han sido necesarios más de tres meses de durísima ofensiva del Ejército iraquí, respaldado por la aviación de la coalición internacional, para expulsar a los yihadistas del este de la ciudad.
Pero la batalla para conquistar Mosul, el último gran bastión del grupo Estado Islámico en Irak, está muy lejos de haber terminado. Toda la parte oeste de la ciudad, al otro lado del río Tigris, sigue bajo control yihadista.
Estos barrios son un entramado de calles angostas, sobre todo en la ciudad vieja. Son barrios en los que además viven 750.000 civiles que, según la ONU, van a correr un “riesgo extremo” cuando se encuentren atrapados en mitad de los combates. Según los testimonios de algunos habitantes, los yihadistas están echando a familias enteras de sus casas y colocando francotiradores en tejados y ventanas.