Un día después de la activación del Artículo 50 para la salida del Reino Unido de la Unión Europea, Londres no parece tener mucha prisa.
Un día después de la activación del Artículo 50 para la salida del Reino Unido de la Unión Europea, Londres no parece tener mucha prisa. El Gobierno británico trabaja con un documento formal, la Gran Ley de Derogación (Great Repeal Bill), que será el trámite legislativo más importante para la separación.
Los responsables británicos del “brexit” afirman que aplicar las condiciones del divorcio llevará su tiempo.
“No podemos cambiar cuarenta años en dos. Nos tienen que dar tiempo en los próximos años para cambiar lo que queremos cambiar. No queremos cambiar todo, gran parte de la legislación europea es buena, nosotros la aprobamos, pero habrá cosas que corregir. Y esto nos llevará un tiempo. El parlamento tendrá sus plazos, fundamentalmente después de nuestra salida de la Unión, para corregir las cosas que considere”, ha dicho el ministro británico responsable del “brexit”, David Davis.
El primer paso será anular la ley de 1972 que valida la legislación europea en el Reino Unido. Más tarde, negociar con Escocia, Irlanda del Norte y Gales qué competencias devueltas desde Bruselas se quedan en Londres, y cuáles son transferidas a los Gobiernos regionales.
Todo sin olvidar las aduanas, la seguridad y la ciudadanía. Un trabajo inmenso.
Con EFE