Solo este sábado se han registrado más de 850 kilómetros de atascos. Es uno de los fines de semana con más circulación del año, porque coinciden en las carreteras los que regresan de sus vacaciones de julio y los que se marchan en agosto.
Con temperaturas máximas en todo el país, los conductores se arman de paciencia:
“Nos vamos de vacaciones a la playa. Llegaremos cuando lleguemos”, decía una mujer.
“Estas son las salchichas. Tenemos agua fresca, está al fondo, bien fresca. No se preocupe, está bien fría, y aguantará bien hasta Argelès”, decía otro viajero.
La situación es especialmente delicada en el sureste de Francia, en el arco mediterráneo en dirección a España y cerca de la frontera franco-española.
Según la agencia de tráfico francesa, es el segundo día más complicado del verano para circular por las carreteras y aconseja dejar los desplazamientos para este domingo.