PUBLICIDADEl vicepresidente de Facebook para América Latina Diego Dzodan ha presentado a la prensa este lunes el centro Estação Hack São Paulo, un lugar único en el mundo para reunir a programadores y emprendedores del mundo digital. La red social además quiere que esté abierto a los jóvenes más desfavorecidos en un país muy afectado por la pobreza y el paro juvenil.
Estaçao Hack São Paulo propondrá cursos de programación gratuitos, talleres para emprendedores y para que los futuros creadores digitales planifiquen su carrera. Dzodan comentó a la agencia Reuters que la compañía quiere rellenar el vacío existente entre un sector tecnológico hambriento de nuevos talentos y una generación deseosa de entrar en el mercado laboral pero que no está lo suficientemente preparada. “Imaginen la oportudindad” dijo el vicepresidente regional, “son gente desempleada que no pueden permitirse seguir una formación y hay mucha demanda de puestos de trabajo que el mercado actual no logra cubrir”.
El 25% de los brasileños de entre 18 y 24 años está desempleado, la mayoría con un nivel de educación mayor que el de sus padres. Es la consecuencia de la peor crisis económica reciente se ha llevado por delante las carreras de toda una generación.
La apertura del centro, un edificio de 1.000 metros cuadrados en la Avenida Paulista, está prevista para diciembre. El primer año aceptará 7.400 alumnos con crases grauitas de código (programación), orientación laboral, emprendimiento y márketing digital.
Dzodan asegura que Estação Hack se enriquece de la experiencia de proyectos anteriores como Startup Garage en Paris, aunque está diseñado específicamente para Brasil.
Por ejemplo, hay toda una rama de estudios enfocados a proyectos de impacto social.
Facebook no es el primer gigante digital que se interesa en el potencial de Brasil. En junio de 2016 Alphabet abrió el Google Campus en Sao Paulo, a solo unos bloques del nuevo edificio de Facebook y también enfocado a la programación y el emprendimiento.
El banco Unibanco anunció la semana pasada que cuadruplicaba su Cubo, un espacio de co-working (trabajo compartido) para jóvenes empresas tecnológicas.
Reuters