El jefe de Gobierno asegura que la coalición es firme y no se van a convocar nuevas elecciones
PUBLICIDADAunque los aliados del primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, cierran filas en torno a la inocencia del político, no son pocas las voces críticas piden su dimisión después de que la policía del país aconsejase imputarle por supuestos casos de corrupción. El jefe de Gobierno, por su parte, mantiene que las acusaciones son infundadas y no piensa en dimitir ni en proclamar nuevas elecciones.
Entre las voces en defensa del primer ministro está la del candidato al cargo en las próximas elecciones, el nacionalista Naftali Benet, que mantiene que es el fiscal general y no la Policía, quien decide si finalmente hay motivos para la imputación. Sin embargo, Benet si ha cuestionado que Netanyahu recibiera regalos en grandes cantidades durante un tiempo prolongado, algo que, a su parecer, es inadmisible para alguien en su cargo. También el titular de defensa, Avidgor Liberman, coincidía en que “es el tribunal el que decide si alguien es culpable o no”.
Entre las voces a favor de la dimisión de Netanyahu está el ex primer ministro y décimo en el cargo Ehud Barak, que considera inadmisibles los supuestos actos del primer ministro y pide su dimisión. Expertos aseguran que los movimientos sociales en contra de Netanyahu podrían acabar afectando a la unidad de la coalición, informa Efe.
Sobre la recomendación hecha por la Policía, el mandatario opina que se trata de un documento infundado y torticero, con poco detalle y que no se sostiene.