Gracias a la Copa del Mundo, a la construcción de nuevas infraestructuras para la práctica de este deporte y al impacto en la juventud, se espera que el nivel del fútbol en el país aumente en los próximos años.
Puede que Rusia no se encuentre entre los favoritos para llevarse el Mundial, pero algo va a ganar seguro. El entrenador Valery Gazzaev está convencido de que este evento será un factor de cambio para el mundo del fútbol en su país.
"Este es un gran avance para nuestro fútbol en Rusia, porque se han construido unas infraestructuras magníficas, se han construido muchísimas instalaciones sociales y, por supuesto, es un ejemplo para nuestra juventud. Le aseguro que en cuatro, ocho años máximo, el nivel de fútbol en Rusia será muy alto y en competiciones tan prestigiosas como esta estaremos entre los favoritos", afirmaba Gazzaev.
Las futuras estrellas trabajan muy duro aquí, en la Academia de Fútbol de Chertanovo, en Moscú. Los niños estudian y entrenan todos los días. Para todos ellos, esta Copa del Mundo es un sueño hecho realidad.
"Mi sueño es convertirme en una estrella y para mí este Mundial abre nuevos caminos en el fútbol", afirmaba un niño.
"Los mejores equipos juegan muy bien. Aprendo de ellos, quiero ser algún día campeón del mundo, jugar en el Barcelona, en el Madrid. Puede que algún día juegue tan bien como ellos o quizás mejor", decía un joven futbolista.
Anastasiya espera conocer a su ídolo, Cristiano Ronaldo. Su sueño es ir al entrenamiento de la selección portuguesa:
"Tenía cinco años cuando me hice fan de Cristiano Ronaldo, para mí es la mayor estrella mundial. Haré lo posible para ir allí porque es una estrella y es mi ídolo".