El historiador y preso de la dictadura franquista cree que la decisión llega con mucho retraso y ya no tiene vuelta atrás
La decisión de exhumar a Franco llega muy tarde para Nicolás Sánchez Albornoz."Podía haberse tomado mucho antes. Sin embargo creo que es ya ineludible, es decir, hay una discusión en torno al hecho pero yo creo que la presión social en este momento es muy fuerte".
El historiador, de 92 años, que fue encarcelado por el régimen franquista cuando era un jóven estudiante, escapó de la obra de construcción del monumento en el Valle de los Caídos en 1948 donde cumplía una condena de seis años.
Sánchez Albornoz recuerda que los presos políticos eran alquilados a las empresas constructoras. Tras 50 años en el exilio, sólo espera algún día dejar de ver la imponente cruz del valle y cerrar las heridas de la dictadura. Del Valle opina que es "un engendro posterior a la guerra con toda la simbología de la victoria franquista, con flechas, con escudos, con águilas por todas partes. Eso no se puede convertir en un cementerio nacional que debería ser neutral y respetuoso con todos los que están allí".