Desde este sábado han detenido siete embarcaciones cuyo destino era Grecia
Las autoridades turcas han interceptado a 330 migrantes que intentaban llegar a suelo europeo. Se encontraban en la región turca de Canakkale e intentaban alcanzar la isla griega de Lesbos, situada a pocas millas de la costa turca. Las personas son de nacionalida siria, afgana, iraní e iraquí.
El controvertido acuerdo firmado en 2016 entre la UE y Turquía por la que este país obtuvo 3000 millones de euros en concepto de ayudas para parar la inmigración, ha hecho que Turquía aumente los controles. Desde este sábado han detenido siete embarcaciones cuyo destino era Grecia. Desde el 10 de agosto, 700 personas han tratado, en vano, de alcanzar territorio comunitario.
Según datos de ACNUR, el número de personas que ha llegado a suelo europeo a través de la ruta del Mediterráneo ha descendido drásticamente desde 2015. Ese año, más de un millón de personas alcanzaron las costas europeas. Sin embargo, pese a esta disminución, Grecia sigue siendo uno de los principales países de entrada y Turquía uno de los puntos principales de salida.