La mala organización de las agencias de reclutamiento llevó al desbordamiento del aeropuerto de Cluj-Napoca, incumpliendo todas las restricciones y medidas de aislamiento social que acompañan a la pandemia. Se ha abierto una investigación.
PUBLICIDADPese a las restricciones y las medidas de aislamiento social impuestas debido a la pandemia, el aeropuerto rumano de Cluj-Napoca aparecía desbordado este jueves. Unos 2.000 temporeros rumanos aborrotaron durante horas las instalaciones. Su destino: Alemania, donde trabajarán varias semanas en el campo. Las agencias de reclutamiento no organizaron debidamente sus horarios de vuelo.
"No es normal que estas personas hayan sido traídas aquí con tantas horas de antelación, sin garantizar las condiciones adecuadas", ha señalado David Ciceo, gerente del Aeropuerto Internacional Avram Iancu en Cluj-Napoca.
Se ha abierto una investigación penal por el delito de frustrar la prevención de enfermedades.
"Los responsables del desastre deben ser sancionados. Respecto al gerente del aeropuerto, es inaceptable que no informara a la Prefectura", ha dicho Ludovic Orban, primer ministro de Rumanía.
En total, 13 vuelos chárter llevaron a temporeros rumanos desde el corazón de Transilvania hasta Berlín, Baden Baden o Dusseldorf. Pese a la crisis sanitaria, dicen que no tienen miedo
Alemania ha puesto en marcha medidas adaptadas a la situación.
"Cada empresa debe asegurarse de que se mantiene una cierta distancia durante el transporte y cuando las personas trabajan juntas, en grupos. Eso es durante los primeros 14 días de cuasi cuarentena, durante los cuales pueden trabajar", ha declarado Julia Kloeckner, ministra de Agricultura de Alemania.
Se espera que Alemania reciba, en los próximos dos meses, a unos 40.000 trabajadores temporeros procedentes de Europa del Este.