Un médico muestra al mundo el alcance de la pandemia en la Gran Manzana. Mientras, Florida se convierte en nuevo foco de preocupación.
PUBLICIDADUn médico del hospital neoyorquino Monte Sinaí muestra al mundo el alcance de la tragedia provocada por el COVID-19. Fuera del hospital se han erigido dos carpas para poder hacer frente a la afluencia de pacientes.
Con más de 21.000 fallecidos, Estados Unidos tiene el récord de muertos. Casi la mitad se han registrado en el área metropolitana de Nueva York.
"Estoy viendo pacientes jóvenes, pacientes de edad avanzada, personas de todas las edades que están muy enfermas... E incluso puede escucharse ahora mismo, mientras camino por las habitaciones de los pacientes y por el pasillo, solo escuchas los respiradores", ha explicado el doctor Erik Blutinger, médico en el Hospital Monte Sinaí de Nueva York.
Iglesias vacías en Pascua
Las esperanzas del presidente Donald Trump de dejar el bloqueo económico para Pascua quedaron en saco roto. Tampoco acertó al pensar que las iglesias estarían repletas. Los fieles cristianos tuvieron que conformarse con ver las misas de Pascua a través de Internet o desde sus coches. La mayoría de las iglesias estaban vacías, incluida la catedral de San Patricio, en Nueva York.
Florida, foco de preocupación
Mientras, crece la preocupación en Florida. Los casos confrmados rondan los 20.000 y hay más de 460 muertos. Aunque algunas autoridades locales ponen en entredicho el recuento oficial de víctimas del Departamento de Salud estadounidense.
Florida está bajo confinamiento obligatorio desde el 3 de abril, lo que significa que todos los negocios no esenciales están cerrados. Las escuelas y universidades lo están desde mediados de marzo.