Kabuga está acusado de financiar las matanzas de cientos de miles de personas de la minoritaria población tutsi en Ruanda en 1994. El empresario, de 84 años, ha sido arrestado este sábado en París, Francia, donde residía con una identidad falsa
PUBLICIDADEstaba clasificado como uno de los fugitivos más buscados del mundo. Félicien Kabuga está acusado de financiar las matanzas de cientos de miles de personas de la minoritaria población tutsi en Ruanda.
El empresario, de 84 años, ha sido arrestado este sábado en París, Francia, donde residía con una identidad falsa.
Su detención ha sido "inesperada" y una "inmensa satisfacción" para la pareja franco-ruandesa Alain y Dafroza Gauthier, que han estado buscando incansablemente a los genocidas de Ruanda escondidos en suelo francés durante los últimos 20 años.
"Aunque no estemos directamente involucrados en la persecución de Kabuga, es obviamente una noticia extraordinaria para nosotros. No sé lo que pasará a continuación en el plano judicial, pero el hecho de que este financiador del genocidio haya sido detenido puede tener repercusiones en otras importantes personalidades ruandesas que están en Francia", ha dicho Alain Gauthier Presidente del Colectivo de partidos civiles de Ruanda.
Y habría varias de esas personalidades. Según él, podría haber hasta 100 presuntos genocidas en Francia.
Francia, tierra de acogida de los genocidas ruandeses
Aunque para Gauthier la patria de los derechos humanos se ha convertido en un país de acogida para estos genocidas, el arresto de Félicien Kabuga cerca de París sigue siendo una sorpresa. Pensó que estaría protegido en algún lugar del extranjero.
"Incluso sin la presencia de Kabuga en suelo francés, ya se decía que Francia era una tierra de acogida para los genocidas ruandeses. Hemos presentado unas 30 quejas pero podríamos presentar muchas más si tuviéramos el tiempo y los medios para investigar. Pero creo que está bastante claro, sí, Francia es el hogar de los genocidas. Y es asombroso encontrar a Kabuga en suelo francés a pesar de todo".
Félicien Kabuga está acusado por la justicia internacional de haber utilizado su fortuna y sus redes para financiar los asesinatos.
En Ruanda, presidió la tristemente famosa Radio Televisión Libre de las mil colinas, el principal instrumento del "Poder Hutu" para difundir el odio a los tutsis y pedir su masacre.
En 1994, el genocidio de la minoría tutsi se cobró entre 800.000 y un millón de vidas.