Polémica reapertura de los centros educativos varios países europeos. El Gobierno británico cambia de planes y no reabrirá las escuelas de primaria en Inglaterra antes del verano porque no es factible.
PUBLICIDADTras el desconfinamiento, la reapertura de los colegios en muchos países europeos no está exenta de polémica.
Las críticas llueven desde la comunidad educativa, hasta el punto de que el Gobierno británico, por ejemplo, ha dado marcha atrás a la reapertura de las aulas de primaria (4 a 11 años) en Inglaterra, simplemente porque no es factible.
Una reapertura prevista en principio para el próximo lunes.
El Sindicato Nacional de Educación pide "más pruebas y evidencias científicas sólidas". Los directores de los centros reconocen los "problemas logísticos" mientras que los padres y madres de los alumnos son reticentes.
"Quiero decir que los aspectos prácticos son enormes. Necesitas potencialmente el doble de aulas, y el doble de maestros o de personal docente, dos cosas que las escuelas mismas no pueden solucionar. Han estado trabajando muy duro para hacer que sus centros sean seguros, reinterpretándolos para que los niños vuelvan, pero no pueden resolver las grandes cosas”, ha dicho la Comisionada de la Infancia de Inglaterra, Anne Longfield.
En Italia, tanto profesores como estudiantes se manifestaron el lunes por separado, coincidiendo con el que hubiera sido el último día del curso escolar.
La inquietud no es por el presente, porque los centros educativos italianos no reabrirán sus puertas, sino por el futuro, por cómo serán las clases tras el verano para garantizar la seguridad tanto de los alumnos como de los docentes.
"Espero que en septiembre se volverá a la normalidad con todos mis compañeros con profesores nuevos. Y espero que sea así porque no me veo otro curso, otro medio año de escuela encerrado en casa", ha comentado Alessandro Biagi, un estudiante italiano de 10 años.
En España, la reapertura de los colegios ha quedado en manos de las regiones y dista mucho de ser generalizada. Solo los alumnos que cambian de ciclo van reincorporándose a las clases presenciales.
Por su parte, el Gobierno francés ha hecho de la reapertura de los centros escolares una prioridad, aunque el protocolo sanitario y la necesaria distancia social ha dejado a una gran mayoría de alumnos en sus casas.