Los pronósticos auguran un batacazo para la República en Marcha del presidente Emmanuel Macron. La única ciudad importante donde podría ganar es Le Havre, con el primer ministro Édouard Philippe con opciones para hacerse con la alcaldía.
PUBLICIDADFrancia vota, este domingo, en la segunda vuelta de las elecciones municipales, anulada hace tres meses y medio a causa de la pandemia.
La participación es la gran incógnita. Se teme que vuelva a ser muy baja, como ya ocurrió el 15 de marzo, cuando rondó el 45%, frente al 63,5% en 2014.
Los pronósticos auguran un batacazo para la República en Marcha del presidente Emmanuel Macron. La única ciudad importante donde podría ganar es Le Havre, con el primer ministro Édouard Philippe con opciones para hacerse con la alcaldía.
Los conservadores Los Republicanos, primera fuerza municipal del país, ven amenazados algunos de sus feudos tradicionales, como Marsella, donde gobiernan desde hace 25 años. Hay suspense en otras grandes ciudades como Lyon, Toulouse, Montpellier y Estrasburgo.
Los socialistas probablemente mantendrán París y a la hispanofrancesa Anne Hidalgo, cuya apuesta por la ecología la mantiene como favorita.
Los ecologistas ganarán apoyos y la extrema derecha los perderá.