Los dos países inician un acercamiento verbal sin olvidar el enfrentamiento de los últimos días
PUBLICIDADAtenas y Ankara relajan las tensiones en el Mediterráneo. El buque turco Oruc Reis ha abandonado la plataforma continental de Grecia y ha regresado a puerto este sábado,
El primer ministro heleno, Kyriakos Mitsotakis, considera que este es un primer paso positivo hacia la desescalada, añadiendo que un diálogo franco es la única manera de resolver los problemas de las zonas marítimas entre los dos países: "Tan pronto como Turquía muestre signos de una sincera desescalada, seré el primero en sentarme en la mesa de negociaciones, en un nivel de conversaciones exploratorias al principio, sobre medidas de construcción de confianza para que podamos dejar atrás este período de tensión, que creo que en ningún caso benefició a la estabilidad y a la paz en el Mediterráneo Oriental. El diálogo, el diálogo de buena fe sin provocaciones unilaterales, es la manera de abordar nuestra cuestión básica y principal, nuestra única cuestión con Turquía, que puede conducir a un tema legal, es decir, la limitación de nuestras zonas marítimas".
La intervención de Estados Unidos parece que ha hecho que Ankara baje el tono. El ministro de Defensa turco Hulusi Akar, sin embargo, repitió sus advertencias a Grecia para que no se convierta en una avanzadilla de los planes de Emmanuel Macron: "Estamos a favor del diálogo. Deseamos que nuestros problemas aquí se resuelvan por métodos pacíficos"
Akar habló desde Kas, teniendo de fondo la isla griega de Kastelórizo, a la que la presidente griega está haciendo una visita de 48 horas. Katerina Sakellaropoulou sostuvo que este enclave, a solo tres kilómetros de Turquía, es una parte preciosa de Grecia. En cuanto a la actitud de Ankara, dejó claro que su país no se doblegará ante las amenazas o las tácticas de chantaje.