Solo un 12% de la población de la UE ha recibido al menos una dosis de la vacuna.
PUBLICIDAD"Inaceptablemente lento". Así es como la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha calificado el ritmo de vacunación en Europa. La situación ahora, dice, es "más preocupante de lo que hemos visto en los últimos meses", debido a la variante británica.
La OMS ha vuelto a insistir en los beneficios de la vacunación y ha instado a aumentar la fabricación para acelerar la inmunización de la población europea.
Hasta la fecha, se han administrado más de 152 millones de dosis en Europa, una cuarta parte (25,5%) de las administradas en todo el mundo.
La Unión Europea espera mejorar sus cifras a partir de abril, con la llegada de más de 350 millones de dosis hasta junio.
Hoy por hoy, solo un 12% de la población de la UE ha recibido al menos una dosis, muy lejos de otros países.
Hay quienes ya han dejado de lado los objetivos de vacunación fijados, imposibles de cumplir por la falta de vacunas.
Suecia ha abandonado su meta de ofrecer una vacuna a todos los adultos para junio, fijando la nueva fecha para mediados de agosto.
En Alemnia, AstraZeneca sigue teniendo detractores, pese a los mensajes de apoyo de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) y la OMS. Para dar ejemplo, el presidente Frank-Walter Steinmeier, de 65 años, era vacunado este jueves con AstraZeneca, cuyo uso ha sido restringido para los menores de 60 años.
Alemania vacunará también en las consultas médicas, tal y como ha anunciado el ministro de Sanidad, Jens Spahn:
"Pese a ser Semana Santa, 35 000 consultorios médicos han solicitado dosis de vacunas para la próxima semana. En total, han ordenado 1,4 millones de dosis. Podremos entregar 940 000 la semana que viene".
Italia, que recientemente superó los 10 millones de casos de COVID-19, acaba de recibir un envío de 500 000 dosis de Moderna. Su campaña de vacunación comenzó lentamente.