Tanto las multinacionales del sector como el Gobierno chino rechazan las acusaciones por el supuesto trabajo forzado de la minoría uigur, que han provocado la apertura de una investigación en Francia.
PUBLICIDADLas principales multinacionales del sector textil, entre ellas la española Inditex, han rechazado las acusaciones por el supuesto trabajo forzado de minoría uigur que han provocado la apertura de una investigación de la Fiscalía francesa.
También, el Gobierno chino ha reaccionado criticando el doble rasero de Washington por el trato que han recibido históricamente las minorías raciales en Estados Unidos.
"Hemos subrayado repetidamente que el llamado "trabajo forzado" en Xinjiang es una mentira urdida por un pequeño número de elementos anti-China de Estados Unidos y otros países, para desestabilizar Xinjiang y dominar a China. Nos oponemos firmemente a cualquier interferencia de fuerzas externas en los asuntos internos de China, con asuntos relacionados con Xinjiang y esperamos que la parte interesada no se deje engañar por las llamadas mentiras sobre el trabajo forzado", ha dicho el portavoz del minsterio chino de Exteriores, Wang Wenbin.
La denuncia ante la justicia francesa fue presentada por un grupo de oenegés que consideran que empresas como Inditex, Uniqlo, Sketchers y el grupo SMCP podrían beneficiarse del trabajo forzado de los uigures, una minoría de religión musulmana, en la región autónoma de Xinjiang.
En esta zona se produce aproximadamente el 20% del algodón mundial, en cuyo cultivo y recolección trabajan los uigures que serían sometidos, según la denuncia, a trabajos forzadas por parte de las autoridades chinas.